El primer secretario del PSC y exministro de Sanidad, Salvador Illa, ha publicado el libro «El año de la pandemia» (Ediciones Península, 2022). «Hubo que tener la mente muy abierta porque la situación era nueva. Había que trabajar con la ciencia, en colaboración con las comunidades y organismos internacionales. Mente muy abierta y flexibilidad», ha explicado en la Cadena SER. Illa ha querido dar su visión sobre un año que «cambió nuestras vidas». «El libro quiere ser un homenaje a los españoles. Dimos una respuesta muy decente a una situación muy complicada. Me parecía que tenía que dejar por escrito reflexiones sobre lo que pasó y reflexiones sobre las lecciones que hemos aprendido», ha explicado. El exministro de Sanidad ha dicho que decente es la palabra que le salió desde el principio: «Fue una sorpresa ver cómo la población aceptaba con ejemplaridad. Las instituciones, la ciencia, los ciudadanos actuamos con mucho sentido común y decencia. También con dosis altas de humildad». «La vacunación fue la pista de salida de la pandemia. Lo que más me emocionó fue ver cómo llegaban las vacunas a todos los lugares. Cuando lo ves, te das cuenta de lo que hemos conseguido en estos 40 años», ha afirmado. «Llevaba una semana en el ministerio cuando me informaron de los primeros casos de coronavirus de Wuhan. Y ya todos los Consejos de Ministros había que hacer informes. Yo tomé posesión el 13 de enero y en marzo ya teníamos el estado de alarma», recuerda. Illa ha explicado los momentos más duros que vivió: «Habíamos detectado que los funerales eran focos de contagio. Hubo un momento que me dijeron que había que limitarlos. Preparamos la orden y en la reunión de las 9:30 lo dije. Recuerdo mucho la mirada del presidente Sánchez Era añadir dolor al dolor». Tal y como evolucionaban los modelos de predicción de los técnicos, fue vital limitar la movilidad de los ciudadanos en la primavera de 2020: «Me comentaron que la proyección era que las UCI estaban llenas. Llegamos a preparar un tren medicalizado que no se llegó a utilizar. Tuvimos que frenar la movilidad para frenar el pico de las UCI sin colapsar». El exministro está convencido de que la pandemia nos ha cambiado a todos: «Lo que eché más en falta es el contacto e ir a ver las cosas. Lo suplí con mucha llamada telefónica a médicos, alcaldes y me apoyé mucho en el equipo. Espero que en lo fundamental espero no haber cambiado mucho. Mi paso por el ministerio fue tan excepcional que no fue normal». «Me ha costado mucho escribir este libro. Ha sido un ejercicio de digestión emocional muy difícil para mí. Hubo cosas entonces que no pudieron salir. Y estoy en proceso todavía», ha contado. Salvador Illa afirma que lo tuvieron claro desde el principio: «Siempre le dijimos a la ciudadanía lo que sabíamos. La credibilidad es esencial y más en estos momentos. Y una de las características de Fernando Simón es la credibilidad. Contamos todo lo que sabíamos que al principio era muy poco y hubo que rectificar como en el caso de las mascarillas. Y esto fue clave, la información directa a la ciudadanía». A nivel personal, tuvo que adaptar rutinas para centrarse en la gestión: «Tomé la decisión de no leer la prensa. No podíamos fomentar la divergencia política. La unidad era esencial. Me aislé y me centré en lo que tenía que hacer. Decidí no entrar en la bronca política porque no hubiera añadido nada». El exministro se trasladó durante ese tiempo a La Moncloa. «Las noches sobre las diez me llamaba el presidente del Gobierno. Tras esta llamada, me relajaba un poco. Dormí relativamente bien, me despertaba muy a primera hora a las cuatro o cinco de la mañana con los primeros datos», ha contado. El libro está prologado por el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón. A lo largo de sus páginas detalla diversos episodios de lo ocurrido durante su etapa como ministro de Sanidad durante la pandemia de COVID en España.