Rosario Casas, la perito calígrafo judicial que confirmó que los papeles de Bárcenas eran auténticos: "Nuestra letra es infalsificable"

Madrid

Rosario Casas y Luis Bárcenas no se conocían, pero ella fue clave en la caída del ex tesorero del Partido Popular. Casas es perito calígrafo judicial y fue la profesional a la que recurrió 'El País' para que acreditara que los papeles de Bárcenas eran auténticos. Ella hizo su trabajo y concluyó que todas las anotaciones estaban escritas de puño y letra por él. Horas después, la histórica información de José Manuel Romero sacudió la política de España. Era el 31 de enero de 2013.

El Caso Bárcenas

-R: "Estuve tres días empapándome de la letra de Luis Bárcenas. Yo tenía muchos documentos de Luis Bárcenas y la conclusión era evidente porque es imposible falsificar catorce documentos. Eran documentos de diferentes años, pude hacer la evolución gráfica de la escritura de Bárcenas y no me cabía ninguna duda. Fue una gran responsabilidad, porque lo iban a publicar todos los medios"

-R: "Cuando escuché a Luis Bárcenas decir que la letra no era suya y que estaba dispuesto a prestarse a prueba caligráfica para demostrar que la letra no era suya me sonrojé. Después, la Policía Científica dijo lo mismo que había dicho yo"

¿Es fácil falsificar una firma?

-R: "Nuestra letra es infalsificable. Nuestra firma y nuestra letra evolucionan con nuestra personalidad. Cada uno de nosotros tenemos rasgos que nos hacen distintos al otro, que nos hacen únicos. Cada uno de nosotros somos distintos al otro. Escribimos a través del sistema nervioso central. Por eso es imposible falsificar una firma. ¡Han llegado a venir a mi despacho pidiéndome que falsifique la letra de alguien! Conozco a personas que han tenido que aprender a escribir con el pie, por un accidente. Cuando aprenden a hacerlo, la escritura era exactamente la misma que cuando podían usar las manos, porque escribimos con el sistema nervioso central"

-R: "Yo no digo esta firma es falsa solo por un rasgo o por un detalle grafológico. Hay rasgos aéreos, por ejemplo. Son esos que no plasmamos, son rasgos idiosincrásicos a cada uno de nosotros y es difícil que los capte de un falsario. La primera norma que tenemos los peritos calígrafos es: "Si dos firmas son iguales, una de ellas es falsa". Es imposible reproducir la firma igual. Si son iguales, una es falsa"

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