El líder de la soberanista Liga, Matteo Salvini, ha asegurado que hoy es un «gran día» porque a Italia «le esperan 5 años de estabilidad», a pesar de que dijo que no puede estar satisfecho con los resultados de su formación, que quedó por debajo del 9%, en las elecciones generales en la que arrasó su socia Giorgia Meloni. «Hoy es un lunes donde hay un Gobierno elegido por los ciudadanos, con una mayoría clara del centroderecha y nos mantendremos durante 5 años, sin cambios, y centrándose en lo que hay que hacer», dijo al comentar el 44% obtenido por Liga, Hermanos de Italia (FdI) y Forza Italia que les permitirá gobernar con mayoría absoluta tanto en la Cámara de los diputados como en el Senado. Explicó que felicitó a Meloni durante la madrugada y aseguró: «ahora trabajaremos juntos», antes de adelantar que ya tienen previsto reunirse hoy para conformar en nuevo Ejecutivo. Salvini analizó los resultados explicando que los italianos han premiado «la oposición» y que FdI fue muy bueno haciendo la oposición al gobierno de Mario Draghi, mientras que la Liga ha pagado estar en un Ejecutivo con el Movimiento 5 Estrellas y el Partido Demócrata (PD) aunque aseguró que «lo volvería a hacer, visto la situación en la que estaba Italia tras la pandemia». «En Italia es un gran día porque a le esperan 5 años de estabilidad y con el anterior Gobierno habríamos tenido nueve meses de un Ejecutivo de litigios continuos», señaló. También admitió que los resultados en estas elecciones no son satisfactorios, con el 8,9% en el Senado, pero que le darán unos 100 escaños, y que desde mañana comenzará un periodo de escucha entre los varios representantes en Italia, pero alejó la posibilidad de una posible dimisión asegurando que está «a tope». «Estamos en un Gobierno del que seremos protagonistas, la semana pasada estábamos en un Gobierno que nos consideraba molestos, como unos extras. Los italianos han elegido la coherencia», aseveró. La Liga no logró superar el 10%, un umbral que en los días previos a la votación había sido señalado como decisivo para el futuro del partido y de Salvini. Al final, quedó con menos del 9% de los votos, muy lejos del 12% que pronosticaban las encuestas y con un importante desplome frente al 34 % de los europeas en 2019 y el 28 % en las generales de 2018.