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Carmen Mola: "Las madres es nuestra novela más social"

Tras ganar el Premio Planeta con 'La bestia' y tras conocerse los hombres tras el pseudónimo, regresa una nueva entrega, 'Las madres', de esta saga de novela negra justo cuando se ha estrenado la adaptación televisiva de 'La novia gitana'

Carmen Mola / DIEGO LAFUENTE

Carmen Mola regresa con Las madres, una nueva entrega, en la que la inspectora Elena Blanco se vuelve a poner enfrente de una trama llena de giros de guion, asesinatos y hechos perversos. Es la segunda novela publicada tras conocerse quién está detrás de ese pseudónimo. Los guionistas y escritores Antonio Mercero, Jorge Díaz y Agustín Martínez, ganadores del Premio Planeta con La bestia, vuelven a publicar con Alfaguara, su novela más social hasta la fecha, que vuelve a hablar de corrupción policial, de violencia contra las mujeres, pero suma un nuevo tema: los vientres de alquiler.

"Es un problema o una situación que, en ese momento, en la sociedad se estaba suscitando, como es la idea de los vientres de alquiler. Y entonces nosotros hicimos un recorrido que es el de no tener opinión. Empezamos a informarnos y de repente entró en la trama. Empezamos a preguntarnos si esto de la maternidad subrogada era tan inocente como parecía, si cada uno puede o no decidir qué hacer con su cuerpo o si hay una mercantilización del cuerpo de la mujer. Con la intención de no dar una idea cerrada al lector, porque hasta nosotros tenemos ideas diferentes", explica Jorge Díaz.

Cuentan lo que hay detrás de las mafias de los vientres de alquiler con un arranque tan potente como el de un hombre asesinado y con el cadáver de un bebé dentro de su vientre. "Estamos hablando de vientres de alquiler, también de violencia contra las mujeres, sí, también de corrupción policial, también del deseo de ser madres o padres. Hay más temas. Yo creo que es una novela que tiene más calado social que las anteriores", explican.

Un viaje que el lector hará a través de Elena Blanco, su compañero Zárate, o una víctima, Violeta. Pero también lo harán junto a una policía infiltrada en una mafia de estas, Reyes. Un personaje que les lleva a sumergir la novela en otro mar de aguas revueltas como es la corrupción policial. Y además se habla de adopción y de maternidad. "Aparece la maternidad y la paternidad. A través de los personajes planteamos cuestiones como qué es ser madre o padre, por qué queremos serlo. ¿Es una necesidad, es un deseo? ¿Es un deseo egoísta? ¿Es un derecho? Todo ese tipo de preguntas son las que van atravesando la novela", apunta Agustín Martínez.

La violencia contra las mujeres ha sido una constante en las anteriores entregas y aquí vuelve a estar presente. "Siempre nos ha interesado mostrar cómo la sociedad ejerce violencia contra las mujeres en determinados momentos. No sé si eso también es algo que ha podido conectar o que le da un plus al mero entretenimineto", reconocen los escritores. "Los lectores de ahora esta y los escritores de ahora se nutren muchísimo de la ficción audiovisual, de las series de televisión, que tiene una narrativa muy concreta y yo creo que está bien subirse un poquito a ese carro y narrar las historias en clave muy visual, que es lo que la gente está muy acostumbrada a ver. Nosotros no tenemos miedo de eso. Yo creo que una de las cosas que nos definen es que escribimos sin miedo. Nos da igual ser o no ser políticamente correctos. El retrato de la violencia es extremo, pero es que creemos que si estamos hablando y reflexionando sobre la violencia hay que mostrarlo", nos cuentan sobre la violencia que hay en sus libros, que comparan con Juego de Tronos.

Carmen Mola ha sido uno de los últimos fenómenos literarios en nuestro país. Su recreación de casos violentos, su personaje femenino, en el que algunos han visto una continuación de Petra Delicado, y su influencia del cine negro, han hecho que este trío de escritores haya vendido más de 600.000 ejemplares. Para ellos, el entretenimiento de los libros ha sido clave. "Lo de ser transversales es algo que nos gusta mucho. Hemos encontrado que los libros les gustan a las madres, a las abuelas y a las hijas, hay un gran abanico enorme de edades en nuestros lectores. Sabemos que no existe una fórmula mágica para conectar con la gente. Es algo que es imposible diseñarlo en un papel y luego ejecutarlo. Ese éxito, esa conexión, sucede de repente", explica Jorge Díaz.

De nuevo, Las madres vuelve a ser una novela en la que el lector no tiene ni un momento de descanso. "Hemos tenido siempre muy en cuenta que al otro lado había unos lectores y que los queríamos entretener, queríamos que entraran en las novelas, que se quedaran enganchados a los personajes y a las tramas que planteamos y que fuera una experiencia intensa a nivel emocional. Meterte en una de las novelas de Carmen Mola y que no pudieras dejarla hasta hasta el final y dejarte con ganas de más. Que quizá una herencia de nuestra experiencia como guionistas de televisión, que es en lo que llevamos trabajando 30 años", añade Jorge Díaz.

Desde que supimos quiénes eran su vida ha cambiado. Ahora promocionan los libros, dan entrevistas y mantienen encuentros con los lectores. "Un escritor no suele obtener visibilidad con sus novelas. A nosotros nos estaba pasando ese milagro, esa visibilidad, pero no podíamos salir a disfrutar de eso, ni de de las firmas, ni del contacto. Nos ha sorprendido lo cariñosos que son los lectores, lo fans que son. Ha sido algo nuevo, de pronto tener una fila de gente que resisten a la lluvia incluso, porque quieren tu firma. Eso es una cosa muy bonita que ahora por fin estamos disfrutando", dice Mercero.

"No sé si el hecho de que ahora seamos conocidos también ha influido un poco en esta nueva entrega Antes escribíamos con una libertad absoluta, porque nadie nos iba a pedir cuentas de nada. Ahora a lo mejor tenemos que estar pensando más en lo que hacemos, pero estamos intentando evitarlo. Queremos seguir escribiendo con esa impudicia del principio", añade Jorge Díaz.

Mientras promocionan Las madres, novela ambientada en Madrid, pero con excursiones a A Coruña, ya se ha estrenado la serie que adapta la primera entrega de las novelas de Carmen Mola, La novia gitana. Dirigida por Paco Cabezas y con la supervisión en el guion de Antonio Mercero, la serie se ha presentado en el Festival de San Sebastián y ya está disponible en la plataforma Atresplayer, con Nerea Barros como Elena Blanco. "Igual hay un poco de sobredosis de Carmen Mola. Si es verdad que coincide la salida de Las madres y el estreno de la serie de La novia gitana. Es una coincidencia feliz para nosotros", explica Antonio Mercero. "Como somos los tres guionistas, hemos estado en el otro lado, a veces adaptando algunas cosas de otros. Hay que tomarse algunas licencias, hay que alejarse un poco del material, es decir, no tenemos que hacer un gran duelo ante cambios que se han hecho con respecto a la novela, no somos talibanes en eso. Entendemos perfectamente que hay una adaptación y que el director la ha llevado a su terreno".

Para ambos, la novela negra es su género favorito. "Es un género apropiado para deslizar la denuncia social o la crítica o la llamada de atención, como lo queramos llamar. Lo haces dentro de una trama que es entretenida, en la que el lector entra y el que se abandona fácilmente y se encuentra con la crítica social. Creo que es más eficaz para mí la ficción y la literatura en general para concienciar a la gente o para hablar de temas importantes". Esta novela la comenzaron a escribir en pleno confinamiento. Luego la aparcaron para escribir La Bestia, y después continuaron con ambas. Ahora preparan nueva entrega con Planeta, la editorial que hace justo un año les puso rostro, no sin cierta polémica, y que será un thriller histórico.

Pepa Blanes

Es jefa de Cultura de la Cadena SER. Licenciada...