Dependientes
"Aun los partidarios de la inclusión en el lenguaje prescindirán de este femenino en algunos casos, para no llamar a equívocos. Una mujer acogida a la Ley de Dependencia nunca dirá que es dependienta. Y la chica que se emancipa, nunca será independienta, sino independiente. Al menos, de momento...", la palabra de Isaías Lafuente
Dependientes
Madrid
Hemos conocido un experimento pionero en Europa promovido por la Universidad de Málaga en colaboración con la Universidad Complutense y la Universidad Miguel Hernández. Durante una semana, se les retiró el móvil a un centenar de jóvenes que solían usarlo cinco horas diarias. Como consecuencia de la experiencia estos jóvenes entre 15 y 24 años mostraron síntomas de ansiedad y dependencia. Esta patología, el miedo a quedarse sin móvil o incomunicado de internet ya tiene nombre: nomofobia. Un acrónimo (No/MOvil/FOBIA) aún no recogido por el diccionario pero bendecido por la Fundeu, en la que participa la RAE.
Pero fijémonos en la palabra dependencia, un término que ha ido extendiendo su significado a través del tiempo. Nombra, en general, la situación de quien depende de algo o alguien, y particularmente a las personas que no pueden valerse por si mismas, desplazando a otras palabras, antes frecuentes, como minusválido o inválido. Dependiente tiene femenino, dependienta, utilizado incluso por los cruzados contra el lenguaje inclusivo que se niegan a llamar presidenta a una mujer que preside, pero tienen asistenta en casa, se dirigen con naturalidad a una dependienta en un comercio e, incluso, con un par de vinos hablan con sus amigotes de su parienta en el bar. Sin embargo, aun los partidarios de la inclusión en el lenguaje prescindirán de este femenino en algunos casos, para no llamar a equívocos. Una mujer acogida a la Ley de Dependencia nunca dirá que es dependienta. Y la chica que se emancipa, nunca será independienta, sino independiente. Al menos, de momento...
La palabra del día de Isaías Lafuente | Dependientes