JxCat rompe el gobierno en Cataluña tras la consulta a sus bases: "Junts gana y Aragonès pierde"

Junts per Catalunya rompe la coalición con su socio en el Ejecutivo catalán, con ERC, tras acumular varias desavenencias en las últimas semanas. El 55% de los militantes de la formación apoyan la salida, mientras que un 42% se muestran a favor de seguir. También ha habido casi un 2% de votos en blanco. Así lo reflejan los resultados provisionales de la consulta interna convocada por JxCat sobre su continuidad en el Govern, cuyas votaciones se iniciaron el jueves y han terminado a las 17.00 horas de este viernes y en las que han participado en torno a un 80% de los afiliados En una rueda de prensa dos horas después de anunciar la decisión de los militantes, la presidenta de Junts, Laura Borràs, ha asegurado que con esta decisión «Junts gana y Pere [Aragonès] pierde, porque no ha sido capaz de liderar un gobierno de coalición». Para ella, Aragonès debería someterse a una cuestión de confianza porque se ha puesto «en entredicho» su gestión. Borràs también ha insistido en que la militancia «ha hablado y todos lo asumimos, lo asume la dirección, lo asume las bases, todos los votos son votos que tenemos en cuenta, la dirección lo tiene en cuenta». La presidenta de Junts ha remarcado que es una «decisión madurada» y que los afiliados han demostrado que «no quieren estar en un gobierno que no avance hacia la independencia». Borràs también ha afirmado que sus «valores están por encima del partido»: «Nuestros afiliados han recordado que debemos salir. Es así porque no se estaban cumpliendo los acuerdos adoptados, no se estaba cumpliendo el mandato de las urnas de febrero de 2021». Borràs considera que tras esta consulta Junts sale «más fuerte». Dice la presidenta que pasan «desde hoy a la oposición para seguir trabajando con toda la intensidad, porque Junts sigue siendo un partido con vocación de Gobierno, es un partido con palabra que cumple sus pactos y si no se cumple se actúa con consecuencia». Además, ha añadido que quieren «gobernar para conseguir la independencia». Para finalizar su intervención, Borràs ha arremetido otra vez contra el presidente y especialmente contra su gobierno, al que consideran «un fracaso» y que «ha perdido legitimidad». El lunes se reunirá la Ejecutiva del partido para fijar las bases de este nuevo escenario. En la misma línea ha intervenido Jordi Turull, secretario general del partido, quien ha asegurado que Junts quiere «liderar la bandera del independentismo» y, aunque ha reconocido que es «una decisión que causa dolor», ese ha sido «el sentido mayoritario de nuestro partido». Insiste Turull en que Aragonès «tiene que reflexionar» porque «no tiene el apoyo de la investidura». Los consellers de JxCat han empezado ya a enviar sus cartas de dimisión al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, entre ellos el conseller de Economía, Jaume Giró, que explicita que ha sido un «honor» trabajar para Cataluña y ha intentado «servir siempre con lealtad» al jefe del Ejecutivo. Así lo ha confirmado en rueda de prensa Turull. En su carta de despido del conseller de Economía, a la que ha tenido acceso EFE, Giró se dirige a Aragonès para comunicarle que «mediante este escrito le manifiesto que, fruto del resultado de la consulta a los afiliados de JxCat, presento mi renuncia al cargo de conseller de Economía y Hacienda». «Ha sido un honor trabajar para el país y los ciudadanos. He intentado serviros siempre con lealtad y os agradezco la confianza que me habéis depositado durante este tiempo», concluye Giró en su misiva. El partido independentista, liderado por Laura Borràs, acusa a Esquerra, socio mayoritario, de no estar cumpliendo el pacto de gobierno, sobre todo, en lo relativo a los avances hacia el procès. Junts considera que se puede hacer más en este sentido, por ello, propusieron el pasado septiembre que el actual president de la Generalitat desde mayo de 2021, Pere Aragonès, se debía someter a una cuestión de confianza en el Parlament. Esta iniciativa levantó tensiones internas, sobre todo, porque se gestionó a espaldas de Esquerra. Tras conocer la propuesta, Aragonès convocó el pasado 28 de septiembre una larga reunión con su socio de Gobierno en la que decidió destituir a una de las caras visibles del Ejecutivo, al vicepresident de Junts Jordi Puigneró. El president decidió prescindir de su número dos en el Govern porque no le advirtió de que su partido iba a plantear que se sometiera a esa cuestión de confianza. Aragonès aseguró en una comparencia que la destitución de Puigneró era un paso que le dolía, «pero del todo necesario para fortalecer el gobierno de Catalunya». Y añadió que el resto de los consellers de Junts per Catalunya cuentan con su confianza y que a él le gustaría que siguieran en el Ejecutivo. El president insistió en que lo que necesita Cataluña es un gobierno cohesionado, que tenga como máxima prioridad el bienestar de los ciudadanos y que esto «no es compatible con una cuestión de confianza». Especialmente, resaltó que mucho menos cuando estamos ante un otoño y un invierno que, a nivel social y económico, se prevé muy difícil. Después de esta decisión, Junts per Catalunya anunció que tenía que decidir qué pasos iba a adoptar. El partido convocó un proceso de consulta para que sus militantes votaran sobre el futuro de la coalición. Han sido dos días de votaciones, que han culminado este viernes con el apoyo favorable a la ruptura. La cuestión de confianza que ha abierto la crisis de Gobierno se llevó finalmente al Parlament este jueves. La Cámara rechazó instar a que Aragonès se sometiera a esa cuestión de confianza antes de que terminara este año, una petición que ha recibido el apoyo de la CUP, el voto en contra de PSC-Units, ERC, comuns y PP, y la abstención de Junts, Vox y Cs. En esta ocasión, Junts decidió abstenerse porque cree que el contenido de la moción que se votaba en el Parlament tiene relación directa con la consulta interna que han celebrado este jueves y viernes sobre seguir o no en el Govern. Asimismo, avisaron de que sería tras finalizar la consulta cuando actuarían en base de la decisión de sus militantes.

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