"Tengo una hija trans. Hay amenazas contra su vida, sólo por existir como ser humano. Hay gente que quiere aniquilarla"
La actriz Jamie Lee Curtis regresa a la saga 'Halloween: el final' reconociendo que no le gustan las películas de terror y que le asusta el momento actual que vive el mundo: la pérdida de derechos en Irán, el auge de la extrema derecha y el odio a las personas trans
Cadena SER
Madrid
Jamie Lee Curtis se ha ganado ese apelativo de 'reina del grito'. Miembro de la aristocracia de Hollywood, hija de dos leyendas como son Tony Curtis y Janet Leigh, la actriz de Psicosis, y uno de los rostros del cine de género, reconoce que es muy asustadiza y que no le gusta el cine de terror. "No me gustan las películas de miedo. Nada. Nada me gusta de ellas. Creo que si se me da bien actuar en ellas es porque mi reacción es buena, no lo entreno, pero reacciono a esas cosas, soy muy emocional y muy sensible", cuenta en una entrevista con la Cadena SER.
Lo que le aterra realmente a Jamie Lee Curtis es el clima actual de violencia y cómo están avanzando los discursos de odio. "Tengo una hija trans. Hay amenazas contra su vida, sólo por existir como ser humano. Hay gente que quiere aniquilarla, a ella y a gente como ella. El nivel de odio es..., como si no hubiéramos aprendido del fascismo, como si no hubiéramos aprendido cuál es el resultado de eso. El exterminio de seres humanos. Eso es aterrador. Así que Jamie Lee Curtis está asustada, y tú también deberías estarlo. Y Jamie Lee Curtis tiene una voz, y está tratando de usarla, y tú también deberías. Y así es cómo cambiamos las cosas, pensando en ellas, aprendiendo, y luego usando nuestras voces para llamar la atención y luchar contra ellas", expresa preocupada.
La actriz ha pasado por España para presentar 'Halloween: El final', el cierre de una de las sagas más populares del cine, iniciada por John Carpenter en 1978. En aquel entonces dio vida al gran personaje de su carrera, Laurie Strode, que sufría el acoso del asesino Michael Meyer. Ahora regresa a ese papel, ya convertida en abuela en la cinta dirigida por David Gordon Green donde la tecnología está muy presente. "Hay una nostalgia de los años 70, de esas ciudades típicas americanas, pre-internet, pre-ordenadores, ciudades totalmente analógicas, donde ese monstruo surgió. De alguna manera, creo que el verdadero monstruo es esta habilidad tecnológica que ahora mismo tenemos para promover violencia y odio hacia los otros, que es lo que hacemos diariamente en redes sociales y lo trasladamos a nuestras vidas. Es como un virus, como una pandemia y Michael Meyers es solo un síntoma de todo esto", explica. "De lo que habla esta nueva película es de que todos somos monstruos. Eso da miedo especialmente en esta época donde está resurgiendo el fascismo, particularmente en Italia, o con lo que está pasando en Irán, donde los derechos de las mujeres están puestos en duda. Es un tiempo que da miedo", dice muy vehemente en esta entrevista en la Cadena SER la musa del género y protagonista de películas como Un pez llamado Wanda o Mentiras arriesgadas.
Elio Castro
Licenciado en Historia del Arte y Máster en periodismo por la Universidad Autónoma/El País. Periodista...