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Jeremy Hunt será el nuevo ministro de Economía británico tras el cese del anterior por la polémica reforma fiscal

Lizz Truss suelta lastre para salvar su pellejo y destituye a su ministro de finanzas, el artífice de su plan de recortes fiscales, que ha puesto en jaque a los mercados | La ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, ha pedido a Truss, que "dimita" tras el cese de Kwarteng

La primera ministra británica, Liz Truss. / TOLGA AKMEN (EFE)

Madrid

El exministro de Relaciones Exteriores británico Jeremy Hunt será el nuevo ministro de Economía después de que el actual, Kwasi Kwarteng, haya sido cesado del cargo por la primera ministra Liz Truss. Durante la carrera por el liderazgo del Partido Conservador, Hunt se presentó para ser el cabecilla tory, pero después de no obtener suficiente apoyo de sus compañeros parlamentarios, apoyó la candidatura de Rishi Sunak. Hunt será el cuarto canciller este año.

La primera ministra británica, Liz Truss, ha cesado a su ministro de finanzas, Kwasi Kwarteng, artífice de su plan de recortes fiscales, que ha puesto en jaque a los mercados, según ha confirmado él mismo a través de Twitter. "Querida primera ministra. Me has pedido que me aparte como ministro de Finanzas. He aceptado", comienza una carta difundida por el propio Kwarteng y en la que alega que "el contexto económico ha cambiado rápidamente" desde que presentó su programa presupuestario el 23 de septiembre. Afirma que, cuando asumió el cargo, ya era consciente de que Reino Unido encaraba una situación "increíblemente difícil".

El ministro saliente sigue considerando "crucial" este plan y mantiene que Truss tiene la visión económica "correcta", en la medida en que "durante demasiado tiempo este país ha estado marcado por tasas bajas de crecimiento y altos impuestos". Asimismo, apela a la "disciplina fiscal", en una misiva en la que promete seguir apoyando la labor del Gobierno ya como diputado raso.

Kwarteng es el segundo titular de Finanzas que menos tiempo ha estado en el cargo, ya que asumió el puesto el 7 de septiembre, tras la llegada de Truss a Downing Street. Ha sido cesado tras interrumpir un viaje a Estados Unidos y apenas unas horas después de aterrizar en Reino Unido, donde ya estaban las espadas en alto.

Por su parte, la primera ministra Liz Truss ha rendido homenaje al excanciller Kwasi Kwarteng, agradeciéndole su "gran amistad y apoyo". En una carta, afirma que fue Kwarteng quien optó por renunciar, describiendo esto como una decisión tomada en el "interés nacional".

El Ejecutivo puso sobre la mesa recortes fiscales por valor de 45.000 millones de libras que no han convencido ni al entorno financiero ni al político y que, en términos de divisas, ha puesto a la libra contra las cuerdas. Truss ya se vio obligada a retirar en cuestión de días la propuesta para rebajar del 45 al 40 por ciento el impuesto sobre la renta para las grandes fortunas.

Algunos 'tories' piden ya la cabeza de la primera ministra y, según el periódico 'The Times', hay un plan en la sombra para sustituir a Truss por un tándem de líderes: los diputados Rishi Sunak y Penny Mordaunt, segundo y tercera en las últimas primarias conservadoras. Esta misma semana, la jefa de Gobierno descartó ante el Parlamento que tenga en mente adelantar las elecciones.

No hay Truss que cien años dure

El plan fiscal anunciado a finales de septiembre desplomó la libra esterlina frente al dólar estadounidense y disparó el coste de la deuda a largo plazo del Reino Unido.

Sturgeon pide a Truss que "dimita" en aras de la estabilidad económica

La ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, ha pedido este viernes a la jefa del Ejecutivo británico, Liz Truss, que "dimita" tras el cese de Kwarteng y de anunciar la modificación de partes del polémico plan fiscal del Gobierno.

En un mensaje en Twitter, Sturgeon ha urgido a Truss a "dimitir" y ha dicho que si esta se niega a abandonar el cargo sus diputados deberían presionar para que se celebren elecciones generales en este país. "Lo mejor que podría hacer Liz Truss por la estabilidad económica ahora es dimitir", ha indicado la líder independentista.

Según Sturgeon, "sus decisiones han aplastado la economía y han sumido en la miseria a ciudadanos que ya tenían problemas con la crisis por el coste de la vida".

"Lo único decente que pueden hacer ahora los diputados 'tories' es pedir el final de su Gobierno (el de Truss) y permitir la celebración de elecciones", ha apuntado.

Encuestas en contra de Truss

Las encuestas de YouGov para 'The Times' muestran que casi la mitad de los que votaron por los conservadores en las últimas elecciones quieren que los parlamentarios del partido expulsen a Truss. El 62% indica que los miembros del partido tomaron una decisión equivocada al votar por la líder, mientras que el 43% quiere que el partido instale a un nuevo primer ministro.

Otro diputado ha señalado que los partidarios de Sunak, Mordaunt y Truss tienen que averiguar cuál es la forma de gobernar. "La gente de Rishi, la gente de Penny y los sensatos partidarios de Truss que se dan cuenta de que ella es un desastre necesitan sentarse y averiguar cuál es el candidato de la unidad".

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El ministro de Exteriores británico, James Cleverly, alertó este jueves de las "desastrosas" consecuencias que acarrearía sustituir a Truss en el cargo, algo que tildó de "mala idea, no solo políticamente, sino también a nivel económico". "Esto es lo más importante del presupuesto, Truss dijo que protegería a las personas y los negocios ante el aumento sin precedentes del precio de la energía. Eso es lo que está haciendo", señaló Cleverly, en un nuevo intento de defender la polémica política económica prometida por el Gobierno, que prevé bajar los impuestos sin recortar el gasto público.

Cambios en la política presupuestaria

Sin embargo, el Gobierno ha prometido que no habrá más cambios en la política presupuestaria después de que los anuncios de Downing Street provocaran una sacudida del mercado y la caída de la libra.

La última encuesta sobre intención de voto realizada por YouGov muestra que los laboristas se sitúan ahora a unos 28 puntos porcentuales de los conservadores. Los 'tories' se harían así con el 23% de los apoyos frente a los laboristas, que obtendrían el 51%. Por el momento, Truss ha descartado convocar elecciones anticipadas.

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