Se pegan a Ferraris: activistas climáticos vuelven a la carga en el Salón del Automóvil de París para denunciar al sector
Los protestantes, miembros de la organización Extinction Rebellion, piden que se implante un transporte público "mejorado" en el país para hacer frente a la subida de los precios del combustible y la electricidad
París
Una docena de activistas climáticos pertenecientes a Extinction Rebellion France, irrumpieron el viernes en uno de los stands del Salón del Automóvil que se celebra hasta hoy en París (Francia), concretamente en el de Ferrari, para pegar sus manos a varios coches deportivos de la fabricante italiana que estaban en exposición para protestar contra las implicaciones de la industria automovilística en el cambio climático.
Los manifestantes han acusado a la industria del automóvil de "lavar su imagen" apostando en sus negocios por "vehículos eléctricos e híbridos", los cuales, para este grupo, "también tienen implicaciones negativas para el medio ambiente", han aseverado. Los activistas por el clima han señalado que "los costes crecientes del combustible y la electricidad" hacen imprescindible el establecimiento de un "sistema de transporte público mejorado" que permita "ayudar a los franceses que viven en circunstancias económicas precarias".
Estos miembros de la organización activista buscan persuadir a los gobiernos de los países donde están presentes a tomar medidas más contundentes para frenar la "emergencia climática".
