La nueva primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, ha acudido este domingo al romano Palacio Chigi de Roma, sede del Gobierno, para escenificar el traspaso de poderes con su predecesor en el cargo, Mario Draghi, en una ceremonia cargada de simbolismo. A lo largo de la mañana, Meloni, jefa de los ultraderechistas Hermanos de Italia (FdI), recibirá de Draghi la pequeña campana con la que los primeros ministros marcan el inicio de las reuniones de su Gobierno, un acto simbólico que marca el traspaso de poderes. La política romana, de 45 años, se ha convertido en la primera mujer en recibir esta campana y como, manda la tradición, la ha hecho sonar con una sonrisa para después estrechar la mano de Draghi. Previamente, vestida con un traje de chaqueta negro y camisa blanca, había sido recibida en el patio central del Palacio Chigi por un piquete de honor, que ha revisado acompañada por el consejero militar de esa institución. Acto seguido, tras rendir tributo a la bandera, ha sido recibida por Draghi en la primera planta del palacio, entre sonrisas y muestras de cordialidad, y después han mantenido una reunión a puerta cerrada para hablar de las cuestiones más apremiantes para el país. El encuentro entre ambos ha sido más largo de lo habitual, de casi hora y media de duración, y no ha trascendido su contenido. Una vez concluida, el piquete de honor de Palacio Chigi ha despedido al primer ministro saliente, Draghi, que gobernó el país durante 20 meses desde febrero de 2021 con una coalición de unidad apoyado por todos los partidos excepto por Meloni, su única oposición. Los trabajadores y funcionarios del palacio se han despedido también de él, dedicándole un aplauso desde las ventanas del edificio. Por último, en esta jornada importante para la nueva primera ministra ha presidido la primera reunión del Consejo de Ministros y aprobar el nombramiento del influyente cargo e subsecretario de presidencia, el conservador Alfredo Mantovano. Draghi había ordenado a su gabinete una transición ordenada y rápida debido a la crisis energética que atraviesa el país: «No doy consejos al nuevo Gobierno, lo único que puedo hacer es dejar hechos», atajó Draghi recientemente. Meloni ha jurado este sábado ante el jefe del Estado, Sergio Mattarella, al frente de un Ejecutivo compuesto por los tres partidos que componen la coalición ganadora de las elecciones del 25 de septiembre: FdI, la Liga de Matteo Salvini y Forza Italia de Silvio Berlusconi. El siguiente paso, en los próximos días, será afrontar la investidura en las dos sedes del Parlamento, el Senado y la Cámara de los Diputados, un formalismo, pues la coalición de derechas cuenta con la mayoría absoluta. La nueva primera ministra de Italia, la ultraderechista Giorgia Meloni, y el presidente francés Emmanuel Macron se han reunido este domingo por primera vez en Roma y han manifestado su voluntad de colaborar en «grandes retos», como la escalada de los precios de la energía o el apoyo a Ucrania, entre otros. La reunión informal, de más de una hora de duración en un hotel de la capital italiana, ha sido definida como «cordial y provechosa» por el entorno de Meloni, que el sábado juró como jefa de Gobierno, la primera mujer en la historia del país. «Como europeos, países confinantes, por la amistad de nuestros pueblos, debemos proseguir con Italia el trabajo emprendido. Lograrlo juntos, con diálogo y ambición, se lo debemos a nuestros jóvenes y a nuestros pueblos», ha tuiteado por su parte Macron, el primer mandatario que se reúne con la italiana desde su llegada al poder.