España gastará cerca de 1.200 millones en su sistema de guerra electrónica

Madrid

En el contexto geopolítico actual, en plena crisis a nivel mundial tras la invasión de Rusia en Ucrania, el Ministerio de Defensa va a multiplicar su inversión en la modernización de las Fuerzas Armadas para adaptarse a las nuevas amenazas. Uno de esos esfuerzos milmillonarios se va a producir en la llamada ‘guerra electrónica’ en la que Defensa tiene previsto gastarse 1.180 millones de euros hasta 2029. Lo hará a través del Sistema Santiago. Se trata del programa de espionaje del Ejército, a través de sistemas de captación de señales electromagnéticas para interceptar comunicaciones de otros países enemigos ante un posible conflicto. Ese programa acaba de ser adjudicado a INDRA por un importe de 10 millones euros, en un contrato negociado sin publicidad (solo se presentó esa oferta).

Según fuentes próximas al servicio de inteligencia español, ese sistema se utilizaría, por ejemplo, “para interceptar o neutralizar radares enemigos, detectar señales navales o aéreas, en el caso de que España se viese implicada en algún tipo conflicto”. Este programa de espionaje del Ejército es uno de los secretos mejor guardados dentro de las Fuerzas Armadas españoles “porque de eso depende la seguridad nacional y la eficacia de la interceptación de ese tipo de mensajes en una hipotética guerra electrónica”, según apuntan estas fuentes. De cara al próximo año, el Ministerio que dirige Margarita Robles tiene previsto invertir 14.7 millones de euros en esa guerra electrónica (el doble que en 2022), aunque la inversión más potente se prevé en 2026 con el desembolso de 107.4 millones de euros.

La modernización del Eurofighter

Dentro del programa de modernización del Ministerio de Defensa, la partida más ambiciosa se reserva para la producción del EF2000, es decir, la mejora del caza español Eurofighter en el que se involucraron Reino Unido, Alemania e Italia. Inicialmente, ese proyecto terminaría en 2026, con un coste estimado de 11.500 millones de euros. Sin embargo, el Ministerio de Defensa ha decidido alargarlo hasta 2035, disparando también el coste inicial que se elevará hasta los 15.800 millones de euros. Solo en 2023, prevén gastarse 619 millones de euros en la mejora del avión estrella de combate español.

Los nuevos presupuestos de 2023 también contemplan la modernización del misil METEOR, en el que se van a invertir 4 millones de euros. A nivel de financiación, ese proyecto culminará en 2024, será entonces cuando se dé por completada la mejora de ese proyectil de alcance medio capaz de llegar a un objetivo situado a más de 100 kilómetros de distancia.

Inversión de 82 millones en armamento

Si se mira con lupa el anexo de inversiones reales del proyecto de presupuestos para 2023, también se puede comprobar que el Ministerio de Defensa prevé gastarse casi 82 millones de euros en misiles, torpedos, reposición de munición y explosivos hasta 2026.

Si se desglosa ese gasto, por ejemplo, el Ejército de Tierra contempla un gasto de 102 millones de euros en armamento ligero, municiones y explosivos durante los próximos cuatro años. En el caso de la Armada, la inversión en misiles y torpedos hasta 2029 será de 83.6 millones de euros, aunque en 2023 solo tiene previsto gastar un millón de euros en la adquisición de misiles Envolved Seasparrow (ESSM) con el que van equipadas las fragatas españolas desde 2017. La Armada también realizará una fuerte inversión en armamento para el 2023 con una partida de 11.5 millones de euros para la compra de armamento de infantería marina (cuatro veces más que en 2022) y con otros 9 millones de euros para la reposición de munición (el doble que en 2022).

El ejército del Aire también tiene previsto invertir 10.5 millones de euros en la adquisición de diversa munición DAB para sus aviones, un gasto que se disparará en 2026 hasta superar los 23 millones de euros.