No son tiempos de privilegios para nadie

Ya saben ustedes que son tiempos de incertidumbre y de dificultades para los bolsillos. La guerra de Ucrania cortó de raíz todas esas buenas expectativas que se nos habían abierto con el final de la pandemia. Los más vulnerables vuelven a ser los castigados, se acentúa la desigualdad y el Gobierno tiene que volver a activar otra serie de medidas para reforzar ese llamado paraguas social, que amortigua los efectos de la crisis.

Cuántas mañanas les despierto hablando de medidas, de cifras, de inflación... Hoy, por ejemplo, conoceremos datos de paro, estamos a la espera de que el Banco Central Europeo anuncie una nueva subida de tipos de interés, con sus consecuencias, por ejemplo, en nuestras hipotecas, y así, casi todos los días.

Pues bien, en medio de todo esto, ayer se abrieron paso dos cifras que nos dejaron claro que en épocas de crisis no pierden todos y que los que ganan son siempre los mismos, concretamente dos sectores, la banca y las eléctricas.

Ayer supimos, por ejemplo, que el Banco Santander consiguió un beneficio récord hasta este mes de septiembre, un 25 por ciento más que en el mismo periodo del año anterior; o que Iberdrola ha ganado en lo que vamos de año un 29 por ciento más. Y todo esto, el mismo día en el que tuvimos que explicar aquí qué era eso de la "recesión técnica" que vaticina la AIReF, que no es una recesión a secas, sin apellido, pero que mete en el cuerpo, otra vez, el miedo, a la incertidumbre económica. Hace unos minutos acabamos de conocer los beneficios del Banco Sabadell: en el primer semestre ha ganado un 92 por ciento mes que en el mismo periodo del año pasado.

Gana la banca, ganan las eléctricas, a los que el Gobierno, ya saben, quiere gravar con unos impuestos especiales, precisamente por estos beneficios extraordinarios, porque en tiempos complicados los que más tiene deberían contribuir en mayor medida para no asfixiar a los más vulnerables. Ayer volvió a insistir en ello la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en el debate de Presupuestos, y volvieron las eléctricas a manifestar su malestar. El presidente de Iberdrola anuncia que van a ir a los tribunales para no tener que pagar ese impuesto que se está tramitando en el Congreso.

Ya ven que hay sectores para los que no opera el principio de solidaridad. Ellos van engordando sus bolsillos, mientras que los de muchos ciudadanos están más delgados que nunca. Los sectores que obtienen más beneficios deben contribuir a resolver la crisis, no son tiempos de privilegios para nadie.