Alonso, abandono y decepción con Alpine: "Otra vez sólo a mi coche, como siempre"

La rabia. El desengaño. La impotencia. Sentimientos que derrochan cada una de las imágenes que ha dejado Fernando Alonso cuando su Alpine le ha dejado tirado a falta de cinco vueltas del final en el Gran Premio de México. Cuando el asturiano tenía amarrados otros seis puntos, la fiabilidad volvió a castigar a su talento. Su carrera, notabilísima, volvió a fraguarse. Esta vez por un cilindro. La salida (pasó del 9º al 7º), su gestión de la carrera, de los neumáticos y su ritmo quedaron en nada cuando no podía ni tan siquiera meter la octava velocidad en recta. El Alpine lo volvió a abandonar.

Seis puntos menos y van...

Alonso lleva cinco abandonos esta temporada. Cuatro de ellos por cuestiones de fiabilidad. Pero este le ha dolido especialmente. La acumulación de desgracias de esta temporada cuando su nivel se aproxima a uno de los más sobresalientes de su trayectoria, le ha terminado por frustrar. "A mitad de carrera iba cómodo. Tanto en Austin como aquí venía haciendo las dos mejores carreras del año. Iba 30 segundos por delante de Ocon y los Mclaren. Perdí un cilindro, iba con 5 cilindros durante 20 vueltas haciendo medio el ridiculo y finalmente se rompió, que era lo mejor", explicó tras la carrera a 'DAZN F1'.

"El equipo quería que nos quedásemos en pista por si había un milagro y nos manteníamos en los puntos, pero otra vez sólo al coche 14 (su dorsal en la parrilla), como siempre. Estoy muy decepcionado", contó. La fiabilidad ha castigado especialmente a su A522 respecto al de su compañero Esteban Ocon, al que aventajaba notablemente en esta carrera (y en la temporada en general) hasta su abandono, aunque la clasificación final diga lo contrario. El francés lo aventaja en once puntos y teniendo en cuenta que Alonso ha perdido en torno a 60 puntos por el camino...

En lo que respecta a lo que de él depende, su actuación le deja satisfecho: "Fue muy bien hasta que el motor paró nuevamente. Estoy contento con la actuación personal, de cómo fue la carrera, mucho mejor que ayer, con buen ritmo y otra vez el coche 14 es el que se para". Para finalizar, dejó un liberador "sólo quedan dos", en referencia a los grandes premios restantes hasta el final de temporada (Brasil y Abu Dabi), como si la paciencia se hubiera agotado fruto de su enésima decepción. “Increíble, vaya temporada, vaya temporada”, es la frase que soltó por la radio cuando le falló el cilindro en México y que bien podría definir su temporada.