El Reto Pelayo Vida conquista el Jebel Rum

Wadi Rum (Jordania)

El penúltimo objetivo del Reto Pelayo Vida 2022 ha sido superado con éxito. Después de dormir a 200 metros de la cumbre y aprovechando los primeros rayos de sol, Nancy, Miriam, Oiga y Ester coronaron el Jebel Rum, de 1735 metros de altitud, a las siete de la mañana hora local. Con lágrimas en los ojos y con la satisfacción del trabajo bien hecho, se ha iniciado un descenso largo y técnico que ha concluido de noche en otra jornada maratoniana para las cuatro supervivientes de cáncer de mama.

"Sí se puede. Es una demostración de que puedo con todo y de que me he superado", relata la gallega Nancy Rego con emoción. Para ella, la escalada era una disciplina desconocida hasta hace unos meses, y la bajada desde la cumbre hasta la localidad de Rum no ha sido fácil. Muchos tramos que asegurar con cuerda y también siete tramos de rápel, el último de más de 50 metros donde las cuatro valientes han tenido que descolgarse para poner el punto y final a su jornada.

Pasar dos noches en la montaña ha entrañado dificultades para las aventureras, durmiendo al aire libre y con amenaza de lluvia incluida. "A más de 1.500 metros de altitud hace frío y viento. Encontramos un huequecito donde parapetarnos. Luego abres los ojos de noche y ves el cielo y lo compensa todo", comenta la catalana Miriam Galisteo. Para combatir estos problemas la organización provee a las mujeres participantes de material de montaña y acampada y de alimentación específica para estas condiciones, como geles, barritas energéticas, sales para el agua o frutos secos.

A todo este soporte se une la guía permanente de Enrique Osiel, Willy Usaola y Rocío Monteoliva, los tres alpinistas que han liderado la expedición y que se van orgullosos del ritmo y valentía de Ester, Miriam, Nancy y Olga, pero también fascinados por la montaña. "En el Jebel Rum parece que cambias de montaña, de zona e incluso de país. De paredes verticales pasas a cañones, con vistas de todo tipo durante el recorrido", afirma la granadina Rocío Monteoliva, que ya había ascendido el lunes la cima con el resto del equipo de expertos para inspeccionar el terreno.

El final está cerca, y eso se ha notado a la llegada a Rum, donde los beduinos locales le han brindado un recibimiento festivo a las integrantes del Reto Pelayo Vida. El Jebel Rum ha supuesto la conclusión de las pruebas de escalada, ya que este viernes la aventura llega al Mar Rojo, donde una prueba de buceo cerrará el largo camino en Jordania de nuestras protagonistas.