José Manuel Albares: "Creo que vamos hacia un recrudecimiento del conflicto. Tenemos que prepararnos para un invierno de imágenes muy duras"

Kiev

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, atiende a los micrófonos de Hora 25 a bordo del tren de vuelta de su viaje a Kiev. Albares vuelve a España después de reunirse con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski y con su homólogo Dmitro Kuleba. La guerra suma 253 días. El contexto no invita a la esperanza, Rusia sigue atacando infraestructuras clave de Ucrania y el invierno acecha. En este contexto responde el titular de la cartera de Exteriores de España.

P: ¿Dónde estamos, ministro? Estamos en un tren saliendo de Kiev.

R: Estamos en un tren, camino de la frontera con Polonia, tenemos todavía muchas horas despues de un buen día de apoyo a Ucrania, a su gobierno, al pueblo ucraniano. Y también de ver de primera mano las cicactrices de la guerra, lo presente que está la guerra.

P: ¿Qué es lo que más le ha impactado de su visita a Kiev?

R: Ha habido dos cosas. Las heridas, la demolición de casas por impactos de misiles o de drones. Y al mismo tiempo, que a pesar de todo eso, la determinación del gobierno y del pueblo ucraniano sigue intacta. No he visto ninguna variación con respecto con lo que vi aqui en febrero dos semanas antes de que se iniciara la guerra.

P: Despues de este viaje a Kiev y de su reunión con Zelenski y su reunión con su homólogo Kuleba, ¿qué conclusiones saca del estado de la guerra y de lo que pueda estar por llegar a corto plazo?

R: Creo que vamos hacia un recrudecimiento del conflicto. No porque Ucrania lo quiera, sino porque Vladimir Putin no quiere reconocer que esta es una guerra injusta e irracional. La determinación de Ucrania sigue intacta y por lo tanto yo creo que estamos todavía ante un largo tiempo de guerra y conflicto.

P: ¿Qué le han pedido Zelenski y Kuleba? ¿Qué le piden al Gobierno de España?

R: Bueno hay dos demandas. Hay una que es material militar para poder defender su democracia, su libertad, su soberanía, su integridad territorial, a los civiles indefensos. Y en esta ocasión hay una nueva petición que es la necesidad de ayuda para los momentos inmediatamente siguientes a los bombardeos. Es decir, para hacer frente a los incendios que un misil provoca una vez que se ha producido el impacto.

P: Me llama mucho la atención, ministro, que le han pedido cristal.

R: Sí, en estos momentos el cristal es un objeto muy caro en Ucrania y muy necesario porque sin cristales en las casas no es posible mantener una mínima temperatura cuando aquí hay zonas que alcanzan muchos grados bajo cero porque entra la nieve y entra la lluvia. En estos momentos, mi homólogo el ministro Kuleba me indicaba que en las zonas donde el frente está especialmente activo está lloviendo muchísimo. Sin cristal es prácticamente imposible poderse guarecer de unas temperaturas que en invierno son tremendas.

P: ¿Y de dónde se saca el cristal? Quiero decir, no se lo vamos a traer desde España, habrá que poner dinero para comprarlo en países cercanos, no sé, ¿cómo se va a operar para aportar cristal a los ucranianos?

R: No es distinto a como podemos aportar otro tipo de material y desde luego nosotros hemos dado el mayor paquete de ayuda humanitaria que hemos dado nunca en la historia a un solo país. Hemos entregado 30 ambulancias especialmente pensadas para inspecciones ginecológicas y para poder dar a luz, para partos, para mujeres embarazadas porque los hospitales y las maternidades están siendo bombardeadas. No es muy distinto eso de la localización de cristales. Lo que sí se necesita es también equipos que los puedan instalar. Y desgradaciadamente, con el ritmo de bombardeos que vamos otro de los problemas es que se necesitarán cristales a lo largo de toda la guerra.

P: Tras su reunión con Kuleba usted fue muy prudente a la hora de detallar el armanento que España va a enviar a corto plazo a Ucrania, pero Kuleba no, Kuleba contó exactamente todo lo que usted había comprometido. Entre ello, una nueva batería antiaérea Hawk. Explíqueme qué es exactamente esto que vamos a enviar a Ucrania.

R: El motivo por el cual no me gusta nunca hablar del material que nosotros entregamos o que vamos a entregar es porque esto es una guerra de verdad. No podemos estar diciendo qué tipo de material, qué cantidades, por dónde van a entrar, cuándo van a entrar...

P: Yo lo entiendo, ministro, intenta no dar pistas. Pero en el momento que es el propio Kuleba, quien ha explicado que España le va a aportar esa batería antiaérea. Me gustaría que explicara en qué consiste y por qué nosotros sí lo vamos a aportar cuando otros países europeos no lo están haciendo.

R: Bueno, él lo ha dejado claro en la rueda de prensa. Además el ministro de defensa ucraniano puso un tuit al respecto. Se trata de unas baterías Hawk, que son unas baterías antiaéreas que pueden ser también muy eficaces contra el lanzamiento de misiles. Eso es en estos momentos una de las cosas que más necesita Ucrania, poder hacer frente a esos lanzamiento de misiles, esos drones que están asolando estos días. Esta misma mañana hemos visto en el espacio de una calle un edificio completamente destruido por un misil en el que murieron hace muy pocos días 16 civiles, incluido una mujer embarazada. Enfrente, uno de los edificios centrales de la red que produce calefacción en Ucrania con un impacto de dron y al lado un edificio de oficinas en el que había caído un misil. Esto no es posible mantenerlo mucho más tiempo. Necesitan esas medidas antiaéreas y antimisiles. Cada país suministra aquello que tiene y que sea adaptado a las necesidades de seguridad que tiene Ucrania en ese momento. España ha colaborado con esto como otros países están colaborando con otras cosas.

P: ¿A Rusia todavía le quedan muchos misiles? Quiero decir, lo que habíamos leído, las filtraciones de los servicios de inteligencia occidentales sobre que los misiles de Rusia eran finitos, pero es que no cesa el lanzamiento de misiles contra Ucrania.

R: Yo le diría que poco importa si le quedan o no le quedan misiles. No se deben utilizar los misiles que le queden a Rusia, sean muchos o sean pocos. No es aceptable el uso indiscriminado de armamento contra población civil. Contra objetivos que claramente no tienen más finalidad que el de aterrorizar a la población civil y romper su moral. Eso tiene que cesar. Las guerras también tienen leyes. El derecho internacional humanitario se aplica también a las guerras. Poco importa el arsenal que tenga o no tenga Rusia. Esta es una guerra de agresión completamente fuera de la legalidad internacional y contraria a la carta de las Naciones Unidas. Tiene que abstenerse de usarlos.

P: ¿Le preocupa una desmoralización de la ciudadanía ucraniana cuando estamos viendo los ataques de los que hablábamos a infraestructuras que pueden hacer que el día a día de los ucranianos se vaya al garete desde el momento en el que Rusia desbarata la red eléctrica ucraniana o la red de agua o el tendido de telefonía móvil y a que los ucranianos les venza la moral?

R: Yo lo que voy constatando es que su determinación es muy grande, que los ciudadanos ucranianos, y así me lo ha trasladado el ministro Kuleba, son muy conscientes de que se enfrentan a una guerra de agresión completamente injusta. Pero es evidente que las condiciones de vida se van complicando. Han empezado los cortes de luz. Cuando salíamos de la ciudad de Kiev dirigiéndonos hacia el tren íbamos cruzando por una ciudad prácticamente a oscuras. Evidentemente la vida se esta complicando y eso va a tener un impacto en la moral de los civiles.

P: ¿Debemos prepararnos para un invierno con imágenes muy duras de sufrimiento y de frío?

R: Desgraciadamente sí. Yo creo que nos tenemos que preparar para ello porque los movimientos de Rusia estableciendo un sistema de reclutamiento obligatorio indican que no tienen ninguna idea de desescalar, sino más bien todo lo contrario, que nos estamos dirigiendo hacia una escalada por parte rusa. Porque las temperaturas bajarán, hasta ahora ha habido suerte y el invierno no ha llegado todavía con toda su crudeza. Pero cuando bajen las temperaturas, si viene una nueva ofensiva rusa con cortes de electricidad... ha habido bombardeos masivos en el último mes, mes y medio de todo aquello que pueda producir electricidad y calor en Ucrania. Sí, yo creo que vamos a ver imágenes duras.

P: ¿Teme que haya un nuevo éxodo de refugiados ucranianos hacia la Unión Europea huyendo precisamente de esto?

R: Me parece bastante inevitable. Me parece bastante inevitable que con una enorme dificultad para tener acceso a luz, a calefacción, con un recrudecimiento de la guerra, con una bajada de las temperaturas... no se vuelva a producir una nueva salida de ciudadanos ucranianos, aunque solo sea temporalmente durante el invierno.

P: ¿Qué significa que Putin haya puesto al frente de la guerra a Serguéi Surovikin, que dirigió a las tropas rusas en Siria, conocido como 'el carnicero de Alepo' por sus métodos brutales, casi sádicos?

R: Conociendo cómo actuó Rusia en Siria, nos podemos esperar un recrudecimiento de la guerra y desde luego no son las vías por las que el gobierno de España y todos los gobiernos europeos nos gustaría que transitaran los próximos meses.

P: ¿Cuánto le preocupan episodios como el del ataque con drones marinos contra la flota rusa frente a Crimea que Rusia denunció el sábado pasado y que estuvo a punto de echar por tierra el corredor humanitario marítimo por el cual se exporta grano al resto del mundo.

R: Ese es un acuerdo muy muy importante. Yo me felicito, me alegro de que Rusia haya decidido volver a ese acuerdo porque estamos hablando de que ese grano supone la alimentación de miles de personas en todo el planeta. Y porque sería añadir una irracionalidad a la irracionalidad y castigar zonas que ya están en suficiente dificultad, como por ejemplo podría ser el Sahel y su seguridad alimentaria.

P: ¿Estamos ante el riesgo de que cualquier episodio de este tipo encienda la llama de algo mucho mayor?

R: Siempre hay un riesgo, pero no hay que angustiar inútilmente a la gente. No hay ningún indicio de que estemos ante un conflicto más allá de lo que ya es un conflicto enorme.

P: ¿Usted descarta que esto termine en un conflicto nuclear?

R: No hay ni el más mínimo indicio de que esto pueda terminar en un conflicto nuclear.

P: Le preguntábamos a Kuleba en Hora 25 cuál el final aceptable para Ucrania, no el mejor final. Y él inistía: Rusia completamente fuera de Ucrania, fuera de los territorios anexionados ilegalmente en esta ultima anexión. Pero también fuera de Crimea. ¿Usted eso lo comparte?

R: Yo tengo claro que sobre Ucrania o sobre su soberanía, sus fronteras, su intergridad territorial... solo puede hablar el gobierno de Ucrania. Nosotros defendemos la soberanía y la integridad territorial de Ucrania dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas. Lo contrario sería volver a tiempos muy oscuros de muros y alambradas y de soberanías limitadas, que son precisamente tiempos que dieron décadas de sufrimiento a Europa. Yo creo que la igualdad soberana de los estados, el desterrar la guerra como forma de resolución de conflictos entre estados y dejar claro que la soberanía y la integridad territorial de un estado dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas es la base de la paz y de la prosperidad y son principios fundamentales de la carta de Naciones Unidas. Estaríamos hablando de una violación del derecho internacional que llevaría a un cambio del orden mundial de proporciones imposibles de calcular.

P: Sobre violaciones del derecho internacional, ¿Putin es un criminal de guerra?

R: No soy yo quien lo tiene que decidir. Desde luego la Corte Penal Internacional es quien está investigando si se han cometido crímenes de guerra para llevar a aquellos que los hayan cometido ante un tribunal y que respondan por ello. Pero desde luego todos hemos visto imágenes. Todos hemos oído testimonios, que insisto, hasta que un juez no lo dictamine, no podemos ponerle esa etiqueta. Pero desde luego todo apunta a que claramente se están cometiendo crímenes de guerra.

P: Ministro, me llamó mucho la atención lo que me dijo Kuleba aquí, en Hora 25, que no hay ninguna línea de comunicación entre Kiev y Moscú ahora mismo. ¿De verdad no hay ninguna línea de comunicación entre dos países en guerra, y que en algún momento tendrán que buscar algún tipo de salida a esto? ¿No existe esa línea de comunicación?

R: Bueno, yo creo a mi buen amigo Dmitro Kuleba, si él lo indica así es así como será. Desde luego, yo sí quiero reconocer la labor que está haciendo Turquía. Turquía está haciendo una labor de mediación muy importante, y ha conseguido el acuerdo del grano y ha conseguido varios acuerdos importantes para el intercambio de prisioneros. Y, desde luego, Turquía tendrá nuestro apoyo para seguir con esa tarea.

P: ¿Y China?

R: China tiene, por su ascendente sobre Putin y la relación histórica que tiene Rusia con China, pero también por ser miembro permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, es decir, por estar llamado a garantizar la paz y la estabilidad mundial, China puede jugar un papel muy importante. Y cuando yo me he encontrado con el ministro de Asuntos Exteriores chino la última vez, en los márgenes de la ministerial de Exteriores del G-20 en Indonesia, siempre lo he solicitado, que juegue ese papel de intentar moderar esta guerra, de intentar moderar a Vladimir Putin para que la paz vuelva lo antes posible.

P: ¿Y lo está haciendo?

R: La diplomacia requiere discreción y, desde luego, no cesaré de trasladar ese mensaje a China.

P: Ministro, ¿la Unión Europea está diseñando ya qué papel va a jugar en la reconstrucción de Ucrania?

R: La Unión Europea ha dado una ayuda importantísima económica, financiera a Ucrania desde el inicio de la guerra. Estamos hablando de paquetes realmente históricos. Y, desde luego, la Unión Europea estará presente en su reconstrucción, tanto como Unión Europea como bilateral.

P: ¿Y habrá empresas españolas en esa reconstrucción?

R: Yo creo que sin duda. Es decir, es imposible, yo no tengo la bola mágica para saber lo que va a ocurrir en el futuro, pero que España estará implicada. Tenemos empresas que tienen un grandísimo expertise en materia de construcción, tanto de infraestructura civil, carreteras, aeropuertos, como de viviendas. Todo eso va a ser muy necesario. Y tenemos la experiencia en zonas en conflicto. En Afganistán estuvimos 20 años y tuvimos una región en concreto de la cual nos ocupamos. Y me ha acompañado en este viaje el director de la Agencia de Cooperación Española precisamente para eso, para ver las necesidades humanitarias a corto plazo pero también para empezar a reflexionar sobre cuál debe ser el papel de España en la reconstrucción cuando vuelva la paz.

P: Decía, tenemos experiencia. Bueno, también tenemos experiencia en muchos países en que, en este tipo de circunstancias y de reconstrucción y demás, nace una corrupción brutal.

R: Bueno, yo creo que no hay que anticipar acontecimientos. Yo creo que estamos hablando de un gobierno democráticamente elegido. Muy comprometido, muy comprometido con el avance y el desarrollo de su propio pueblo. Y con el deseo de incorporarse a Europa y, por lo tanto, de alcanzar los estándares europeos. No, yo tengo confianza en el futuro de Ucrania.

P: Eso cuándo va a pasar, la incorporación a la Unión Europea de Ucrania.

R: Es imposible saberlo. Todos sabemos cómo funciona la entrada en la Unión Europea, es como le ocurrió a España. Hay un estatuto de candidato, por tanto, hay un futuro de Ucrania como miembro de la Unión Europea porque se le da el estatuto de candidato. Pero hay un procedimiento que seguir y unos objetivos que cumplir, y en eso está Ucrania.

P: ¿Cómo ha visto a Zelenski y a Kuleba anímicamente?

R: Les he visto con determinación, les he visto con claridad de ideas, no minimizan la situación, no minimizan las dificultades, tienen muy claro a lo que se enfrentan. Pero también les he visto esperanzados, pensando en el futuro, pensando en el día que vuelva la paz, pensando en la reconstrucción. Incluso con sentido del humor en estas circunstancias tan dramáticas.

P: A pesar de que estaban agotados.

R: A pesar de ello son capaces de bromear y de reír durante unos segundos conmigo. Y también les he preguntado, sobre todo, evidentemente, a mi homólogo Dmitro Kuleba, al que conozco bastante bien y además sintonizamos mucho, pues por su vida personal, sus hijos, cómo lo llevan, esta situación tan complicada. Porque, al final, igual que para mí él también es un padre de familia con hijos. Y detrás del ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania hay una persona, con una familia, en condiciones muy muy complicadas.