Twitter, el supermercado
Este cambio de propiedad ha servido para reflexionar sobre aspectos tales como que no hay empresa sin dueño
Madrid
Twitter, el supermercado. Fingíamos que Twitter era una suerte de plaza pública cuando solo era un supermercado. Ahora su compra por parte del hombre más rico del mundo Elon Musk ha situado esta prosaica realidad en primer plano y es imposible que continuemos con ese fingimiento. Hemos depositado en esa red social de 200 millones de usuarios una parte de nuestro capital simbólico, medido por el número de seguidores. Y resulta que probablemente a partir de ahora no solo no nos darán intereses por ese capital, sino que nos cobrarán por tenerlo colocado ahí.
Twitter, el supermercado
Si acaso, este cambio de propiedad ha servido para reflexionar sobre aspectos tales como que no hay empresa sin dueño, Twitter también los tenía antes: sobre la libertad de expresión y sus límites, dado que Musk ha comenzado a hablar de ello y si un tipo como Donald Trump tiene cabida en su seno; sobre la regulación de este tipo de empresas gigacapitalistas que están en todas partes del planeta o sobre los datos de cada uno de nosotros como materia prima para aquellos a quienes los cedemos de forma gratuita, sin ser conscientes de ello. De este punto y 25 también saldrá un tuit y seguirá la rueda.
Joaquín Estefanía
Es periodista, exdirector del periódico 'EL PAÍS'...