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La central nuclear de Zaporiyia recupera la electricidad de nuevo y la ONU alerta de que "no puede seguir así"

El director del OIEA ha advertido de la gravísima situación de seguridad y protección nuclear a la que se enfrenta

Central nuclear de Zaporiyia. / Dmytro Smolyenko

Madrid

La central nuclear ucraniana de Zaporiyia, ocupada por Rusia desde marzo, ha recuperado el suministro eléctrico externo para sus sistemas de seguridad, que perdió por un bombardeo el miércoles, ha confirmado este sábado el OIEA, que ha alertado de que las continuas interrupciones son un peligro que no puede continuar.

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"Los repetidos cortes de energía demuestran con demasiada claridad la gravísima situación de seguridad y protección nuclear a la que se enfrenta esta importante central nuclear", ha advertido en un comunicado Rafael Grossi, el director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), una agencia de la ONU.

Grossi ha asegurado que "hasta ahora" el personal de la planta ha logrado mantener la seguridad en los seis reactores de la planta, la mayor de Europa. "Pero no puede continuar así", ha alertado el diplomático argentino en relación a las repetidas pedidas de suministro eléctrico debido a explosiones y bombardeos, que fuerzan periódicamente a recurrir a generadores de reserva para mantener sistemas esenciales, como la refrigeración de los reactores.

Grossi ha recordado también que lleva meses reclamando que se establezca una zona de protección y seguridad nuclear alrededor de Zaporiyia "para evitar un accidente nuclear". "No podemos permitirnos perder más tiempo. Debemos actuar antes de que sea demasiado tarde", ha dicho el responsable del organismo de la ONU encargado de promover el uso seguro y pacífico de la energía atómica.

Zaporiyia perdió de nuevo todo su suministro eléctrico externo el pasado miércoles debido a bombardeos, de los que se acusan mutuamente Ucrania y Rusia. Este viernes por la noche, los técnicos ucranianos de la planta, ocupada y dirigida por Rusia, lograron restablecer el suministro con dos fuentes externas, por lo que desactivaron los generadores diésel que habían estado alimentando los sistemas de la central.