20 años del Prestige: "Todavía siento impotencia porque veíamos el chapapote y nos mentían en la tele diciendo que eran hilitos de plastilina"
El domingo se cumplen 20 años del accidente que provocó el mayor desastre medioambiental en la historia de España. En Hora 25 hablamos con los responsables y protagonistas del documental de SER Podcast 'Chapapote: la mancha del Prestige", que reconstruye aquellos días de 2002
Madrid
Este jueves se cierra, con el cuarto y último episodio, dedicado al juicio, el documental de SER Podcast que aborda todas las derivadas de la catástrofe del Prestige: el accidente, la marea negra, la gestión política y el proceso judicial. Durante los meses de trabajo que hay detrás de 'Chapapote: la mancha del Prestige' que reúne decenas de testimonios en primera persona, material de archivo, una reconstrucción minuciosa de los primeros días del accidente y del avance del vertido, la directora, Ana Alonso de Blas, explica que ha descubierto muchas cosas sobre lo que sucedió. "Es un suceso que estaba lleno de capas interesadas. Muchas cosas no se pudieron admitir. Lo interesante es, 20 años después, organizar todo lo que pasó".
20 años del Prestige: "Todavía siento impotencia porque veíamos el chapapote y nos mentían en la tele diciendo que eran hilitos de plastilina"
Ese ha sido el objetivo de este trabajo que ha guionizado el periodista Manu Tomillo: arrojar luz sobre aquellos días con la distancia y las posibilidades que dan 20 años. "El entonces 'conselleiro' de Pesca [del PP] no se atrevía a decir cosas que ahora sí se atreve a decir, como que una casa dividida [por su partido, por el gobierno de la Xunta de Galicia] no prevalecerá". En su opinión, "el Gobierno estaba intentando hacer una fake news en directo", y eso mismo es lo que, dos décadas después, explica Ana Alonso de Blas, hace "llorar a pescadores, mariscadores, voluntarios, que se emocionan recordando, pensando en esa impotencia de estar recogiendo alquitrán y que les dijeran que no estaba pasando nada".
Lola Gondar, mariscadora, vicepatrona de la cofradía "San Martiño" de O Grove, resume sus sentimientos, 20 años después, con esa misma palabra. "Impotencia, porque yo creo que si llega a haber otro barco que pase por ahí estamos en la misma situación. Es una impotencia. Veíamos todo el chapapote que nos venía encima y que nos estaban mintiendo en la tele diciendo que eran unos hilitos de plastilina. Impotencia total porque era mentira todo lo que estaban contando", cuenta en Hora 25.
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"Esas mentiras están en el fondo de la amplitud de la respuesta", explica Manuel Rivas, el escritor gallego que se convirtió en cabeza visible del movimiento de protesta 'Nunca Máis'. "Es importante recordar cómo desde el principio, el propio día 13, uno de los pilotos de los helicópteros de rescate ya habla de una mancha inmensa de 30 km y la primera nota que emite la Delegación del Gobierno se refiere, de una manera secundaria, a que hay unos vertidos. Anticipa en ese sentido lo que hoy llamamos fake news, posverdad o hechos alternativos". Rivas señala, además, culpables mucho más allá del único condenado en el juicio del Prestige, el capitán del barco, Mangouras, o de José Luis López-Sors, entonces Director General de la Marina Mercante. "Quedan enigmas, como si realmente alguien como López-Sors es tan determinante en esa decisión [de alejar el barco de la costa]. Tengo claro que el enigma es quién decidió eso. Tuvo que ser alguien muy por encima. No pudieron tomar esa decisión sin Aznar, estoy seguro", remata el escritor.
La decisión de alejar el barco provocó que la mancha de chapapote se extendiera a cientos de kilómetros de la costa gallega, desde a Costa da Morte hasta las Rías Baixas. El chapapote que da título a este pódcast en el que Roberto García, responsable de diseño sonoro, consigue que el oyente tenga la sensación de tocarlo y hasta de olerlo. "Hemos intentado que la gente pueda ver lo que era el chapapote. Montse Domínguez, que ha estado muy involucrada en todo el proceso del pódcast, cubrió en la televisión la catástrofe y siempre nos decía que es una cosa muy televisiva. Y eso nos motivaba. Decíamos: vamos a intentar que la gente pueda escuchar lo que era el chapapote, cómo salía del barco, cómo llegaba a las playas, cómo lo recogían con las manos y luego con horquillas, y lo metían en sus propias lanchas y en cubos. Eso hemos intentado y por eso es importante que se escuche de la mejor forma posible", explica cuando Aimar Bretos le pregunta por qué es mejor ponerse auriculares para disfrutar de 'Chapapote: la mancha del Prestige'.
Aquella catástrofe tiene "un componente de drama shakesperiano, que es el declive de la corte de Manuel Fraga. Aquel señor que había gobernado Galicia 12 años de una manera absoluta, que estaba muy mayor, 80 años, que no había nombrado un sucesor, y había dos sectores en el partido que empezaban a disputarse por debajo de la mesa la sucesión. El Prestige quiebra aquello", recuerda Xosé Hermida, corresponsal parlamentario de El País y, entonces, el delegado de El País en Galicia. También le da, el recuerdo de la catástrofe y sus consecuencias, para hacer "política ficción", porque "sin el Prestige no sabemos qué sería hoy de Alberto Núñez Feijóo. Feijóo era un ejecutivo de empresas públicas que estaba en Correos y va a Galicia porque le cortan la cabeza a Cuíña [entonces número 2 de Fraga que acabó siendo la principal víctima política del chapapote por el asunto de una venta de botas para limpiar las playas]. Va comandado por el PP nacional para hacerse cargo. Tal vez nunca hubiese llegado a ser presidente de la Xunta ni presidente ahora del PP".
Hermida recuerda aquellas semanas como extenuantes, por un trabajo, además, en el que "la distancia que se nos exige a los periodistas te costaba mucho mantenerla. Yo soy de un pueblo de las Rías Baixas y veía a mis compañeros del colegio sacar el chapapote con cubos y con palas y desesperados porque llegaban con los barcos a puerto y nadie había puesto contenedores para depositarlo". Así que, 20 años después, resume sus sensaciones, sus recuerdos, con dos palabras. "Por un lado, la infamia de los que intentaron negarlo todo y construir una realidad alternativa. Y, por otra parte, el orgullo de cómo reaccionó el pueblo gallego, que no esperó a que nadie le fuese a solucionar la papeleta, sino que la gente salió a hacerle frente al fuel". Un trabajo para el que contaron con la ayuda de una marea de voluntarios llegados de toda España que Lola Gondar se emociona al recordar en Hora 25. "Tenemos que sacar que toda la gente se volcó con todos los gallegos. Tenemos mucho que agradecerles porque aquello era impresionante, toda la gente que vino a ayudarnos".
'Chapapote: la mancha del Prestige' se puede escuchar en cadenaser.com y todas las plataformas de pódcast.
Chapapote: la mancha del Prestige | Episodio 4: el juicio