Llega una DANA a España: estas son las zonas donde se registrarán lluvias torrenciales y posibles inundaciones

Madrid

España espera la llegada este jueves de una nueva depresión aislada en niveles altos (DANA), que traerá fuertes y persistentes precipitaciones, principalmente, en las regiones mediterráneas hasta el sábado o el domingo. El fenómeno meteorológico pondrá en riesgo este jueves al archipiélago Balear y, el viernes, a la Comunidad Valenciana, lo que provocará que la región entre en alerta naranja.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha recomendado a la población de estas zonas tomar preocupaciones tales como mantenerse alejados de los cauces que habitualmente están secos y que, ahora, pueden sufrir grandes acumulaciones de agua a causa de las lluvias intensas. Asimismo, el portavoz del organismo, Rubén del Campo, ha avisado de que existe la posibilidad de que aquellas actividades que normalmente se realizan al aire libre, puedan ver alterada su celebración.

Este jueves se han registrado, hasta la 06:00 horas, chubascos intensos en Mallorca y en la provincia de Barcelona, que podrán mantenerse durante el resto de la jornada, y extenderse hasta la Comunidad Valenciana y Murcia. En el resto de la Península, se prevén cielos poco nubosos, con nieblas de madrugada y temperaturas diurnas que irán en ascenso, especialmente, en la zona de Levante. El ambiente de nubes y lluvias, bajará las temperaturas.

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Previsión para el viernes

Durante la jornada del viernes, la Dana estará situada sobre el sur del territorio peninsular y en el área mediterránea, donde los vientos marítimos serán especialmente húmedos. Con ello, se predice que habrá lluvias fuertes y de carácter tormentosos, que en Valencia serán particularmente virulentas. Se calcula que en la región valenciana se van a llegar a acumular al menos 80 litros por metro cuadrado en 12 horas. Por lo tanto, se pide precaución en el resto de la mitad oriental peninsular y en el área del estrecho, ya que son posibles algunas lluvias y chubascos más suaves e intermitentes.

En el resto del territorio, se esperan cielos poco nubosos con posibilidad de formación de bancos de niebla por la mañana. En determinadas zonas de la meseta la niebla podrá ser más intensa, lo que disminuiría la visibilidad de forma destacable. Por ello, precaución al volante. Las temperaturas, por su parte, bajarán en el área del mediterráneo y se mantendrán en el resto de España. Se superarán los 20 grados en las horas centrales del día en el Cantábrico, Cataluña, la zona sur mediterránea, Islas Baleares, el tercio oeste de Andalucía y el sur de Extremadura.

El sábado, continuará el tiempo inestable

El sábado seguirá la inestabilidad climatológica marcada por los chubascos tormentosos en las regiones mediterráneas, en el sur de Cataluña y en la región valenciana, aunque con tendencia a remitir durante la segunda mitad del día. Las precipitaciones serán más suaves que las del viernes, pese a que no se descarta que sean localmente intensos. No se descartan, sin embargo, chubascos en Aragón, resto de Cataluña, el entorno del sistema central y Baleares. En el restante territorio, predominarán los cielos poco nubosos, con extensos bancos de niebla.

Las temperaturas diurnas subirán notablemente en toda la península, por encima de los 20 grados en el Cantábrico, el Área Mediterránea, archipiélago balear y buena parte de la mitad sur. Se alcanzarán incluso los 25 grados en las ciudades de Sevilla o Granada, en el extremo norte y Andalucía oriental. Hablamos de temperaturas de entre 5 y 10 grados por encima de lo normal.

Un domingo similar

El domingo presentará pocos diferencias respecto a la víspera. Se registrarán aún restos de la inestabilidad en el Mediterráneo y Baleares, con algunos chubascos más suaves. Un frente se acercará a Galicia dejando lluvias, sobre todo en el oeste de la Comunidad, en el resto cielos poco nubosos, bancos de niebla matinales y temperaturas que no variarán demasiado. Ya el lunes el frente que entraba por Galicia el día anterior desaparecerá. Las lluvias serán más abundantes en el Cantábrico, Pirineos y el entorno del sistema central, es decir, en el sur de Castilla y León y el norte de Extremadura.