Almodóvar y otros representantes de la Cultura arropan a Paco Bezerra y su obra "cancelada" sobre Santa Teresa
El cineasta acudió a la lectura dramatizada en la Fundación SGAE de 'Muero porque no muero (La vida doble de Teresa)' que fue retirada de la temporada de los Teatros del Canal, dependientes de la Comunidad de Madrid
Después de varios meses hablando de Muero porque no muero (La vida doble de Teresa), la pieza se ha representado, en forma de lectura dramatizada en la Sala Berlanga de la Fundación SGAE. Es la obra de Paco Bezerra que el autor tenía previsto estrenar esta temporada en los Teatros del Canal, pero que finalmente se eliminó de la programación. Bezerra denunció un caso de censura que le ha llevado a comparecer la semana pasada en la Asamblea de Madrid, ya que no había motivos, ni económicos ni de otro tipo que justificaran, explicaba el dramaturgo en la SER, esa decisión.
Las actrices Ana Belén, Gloria Muñoz, Natalie Poza, Aitana Sánchez-Gijón y Julieta Serrano han puesto voz a un texto que presenta a una Santa Teresa que regresa a la vida en el Madrid de hoy, dirigidas por Matías Umpierrez. Una santa Teresa polifónica, en palabras de su autor, que antes de la presentación ha manifestado su satisfacción porque el texto vea la luz y por contar con cinco actrices que "nunca hubiera conseguido si no hubiera pasado lo que ha pasado".
"Un acto simbólico más que artístico", calificaba el dramaturgo que habló durante la lectura. A ese acto asistieron muchos rostros conocidos y muy significativos del mundo de la cultura. El primero el cineasta Pedro Almodóvar, que habló durante el coloquio con el público. El director manchego lamentó esta situación y recordó cuando estrenó en 1983 Entre tinieblas, protagonizada por monjas yonkis, no fue objeto de ninguna censura. Además, animó a Bezerra a alir él mismo como intérprete a los escenarios: “Si quieres, yo te dirijo”.
Muero porque no muero (La vida doble de Teresa) fue premio de dramaturgia en la XXX edición del Premio SGAE de Teatro Jardiel Poncela 2021 y por eso se representa en este ciclo de lecturas dramatizadas. El premio constaba de una dotación económica, la edición de un libro y una lectura dramatizada. "Estar aquí no es una estrategia de ningún tipo", incidía Bezerra sobre el escenario. "Esto es una llamada para decir que estamos aquí y que hay gente que se está quejando", apunta.
Para este acto el dramaturgo ha contado con estas cinco actrices, que accedieron sin pensarlo y sin leer el texto. Vestidas de negro estaban sobre el escenario, delante de un atril ante la sala completa. Cuadrar la agenda de las cinco actrices no ha sido fácil, más que una labor artística es un "acto simbólico", sobre todo en la medida en la que ellas accedieron a participar en la lectura, después de que Belén Cuesta, la protagonista de la obra, no pudiera acudir al encontrarse rodando. "Optamos por una Santa Teresa polifónica, a cinco voces, en lugar del monólogo tradicional que se representa en la obra", subraya Bezerra, que confía que esta lectura sirva para callar a la consejera de Cultura de la Comunidad de Madrid, Marta Rivera de la Cruz, que "dijo que ningún profesional de la cultura se había quejado" por la situación del dramaturgo.
Entre el público también estaba la actriz Marisa Paredes o el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero. Actores y directores se encontraban entre los asistentes que han acudido a apoyar al dramaturgo: el director del Centro Dramático Nacional, Alfredo Sanzol, Jesús Cimarro, presidente de la Academia de las Artes Escénicas de España. También Secun de la Rosa, María Adánez y Álvaro Cervantes, Elena Anaya, Macarena García, Goya Toledo entre otros. También acudió Mónica García, portavoz de Más Madrid en la Asamblea regional, y Rita Maestre, portavoz de esta formación en el Ayuntamiento.
Muero porque no muero (La vida doble de Teresa) es un monólogo que iba a estar protagonizado por Belén Cuesta y que contaba qué Madrid se encontraría la santa si volviera a la vida en 2022. Un Madrid con mujeres indocumentadas, con adicción a la heroína y con una utilización de su imagen por parte de la Iglesia que, según el texto, no gustaría a Teresa, una mujer que puso en jaque a la institución y que tuvo ideas adelantadas a su época.
La obra iba a estrenarse en enero de 2023 en los Teatros del Canal, hasta que su directora artística, Blanca Li, telefoneó a Bezerra para cancelarla. Le explicó que se debía a cuestiones económicas, algo que Bezerra ha desmontado, ya que obtuvo una ayuda de Europa que financiaba la totalidad de la obra. De hecho, la SGAE ha manifestado que la calidad del espectáculo quedaba acreditada por su selección en el programa internacional desarrollado por la red europea de teatros Prospero, integrada, además de por los Teatros del Canal, por prestigiosos teatros de Berlín, Varsovia, París, Módena, Lisboa, Gotemburgo y Zagreb. El hecho de que ningún teatro le haya llamado para programar la obra, según Bezerra, pone de manifiesto "que todos dependemos de la Comunidad como unidad de producción".
Después de otra polémica con el Festival EÑE, que cambió en el último momento la sede de un encuentro entre varios autores donde se encontraba el propio Bezerra, de una biblioteca pública, dependiente del gobierno regional, a una librería privada, Bezerra compareció en la Asamblea de Madrid, donde trató de demostrar que ha sido víctima de un caso de intromisión y censura política. Allí Vox felicitó de nuevo al gobierno regional por haber retirado la obra. A lo que Bezerra respondió: “Usted juzga con su moral, que no es la de todos los madrileños, sáquese a los madrileños de su boca, porque los madrileños no quieren estar en su boca. Yo respeto a Santa Teresa mucho más que usted. Hay que leer antes de hablar".