Punto de Fuga
Internacional

España no acaba con el estigma del VIH

En los últimos cuarenta años de trabajo de Cruz Roja con enfermos de Sida, “ha habido un avance significativo de la sociedad española”, pero el estigma no se ha eliminado del todo

GRAFCAT3868 BARCELONA 01/12/2022.- Miembros de la organización y entidades del sida Comité 1D formaron un lazo humano en la Plaza Sant Jaume de Barcelona para sensibilizar, dar visibilidad y apoyo a personas que viven con VIH durante la conmemoración hoy del Dia Mundial de la lucha contra el SIDA.. EFE/Quique Garcia / Quique Garcia (EFE)

Pese a los estudios que indican un avance en cuanto a la percepción que los españoles tienen acerca del Sida, todavía hoy un 17% de personas en España dicen que se sentirían incómodas relacionándose con una persona con VIH. Un 10%. No querrían tener ninguna relación y un 9% no querrían que su vecino o vecina tuviese el virus. El pasado 1 de diciembre se celebró el Día Mundial de la Lucha contra el Sida, una lucha en la que lleva cuatro décadas trabajando la organización Cruz Roja.

Al servicio de los ultras

Mar Echenique, psicóloga, sexóloga y responsable de los proyectos de salud mental dentro del área de Salud de Cruz Roja trabaja en los programas de VIH desde el año 2009. En estos últimos 40 años, dice, “afortunadamente ha cambiado mucho y ha cambiado a mejor” la percepción de la sociedad española. Recuerda que en los años ochenta había un gran miedo y estigma al respecto. “No se sabían todavía las vías de transmisión, entonces había muchas creencias como las cuatro haches: personas homosexuales, personas hemofílicas, heroinómanos y haitianos, porque en Haití hubo muchísimo”. En ese contexto, para muchos, era “una plaga, un castigo”.

Esto, sumado a que era una enfermedad mortal que se desarrollaba muy rápido, acrecentaba el miedo a acercarse a una persona enferma. El primer trabajo de Cruz Roja era asistencial, explica la psicóloga, porque “muchas veces ni sus propios familiares ni su entorno querían acercarse”.

Echenique cree que, pese a los avances, sigue habiendo demasiada desinformación y estigma. La mayoría de los encuestados en España dicen no conocer a nadie con VIH y, sin embargo, hay trece personas de cada cien que lo tienen. “Todavía tienen miedo de contarlo y no se visibilizan, sobre todo las mujeres porque va muy ligado a la promiscuidad sexual”, explica.

Los avances médicos permiten que hoy en día las personas portadoras del virus puedan llegar una vida completamente normal y con la misma esperanza de vida que una persona que no lo padezca. La psicóloga insiste en que no hay excusa para tanta discriminación y marginación como había cuando se les negaba a los enfermos poder hacer un seguro de vida, por ejemplo, lo que les impedía adquirir una vivienda. El próximo reto es alcanzar un tratamiento que lo cure del todo o hallar una vacuna.

El lado negativo de esta cronicidad de la enfermedad es que se está bajando la guardia, reconoce la experta, por eso continúan con campañas de sensibilización muy dirigidas a la población joven. “Ponerse un preservativo les resulta más incómodo que el riesgo de contraer VIH, y eso es muy peligroso porque es un tema de salud pública”, explica. Aunque España tenga acceso a los tratamientos antirretrovirales, Echenique recuerda que otros muchos países no tienen las mismas condiciones.