Hora 14 Fin de Semana
Sociedad | Actualidad

Tusi, Popper, Mexxy, Mefedrona o GHB: las nuevas sustancias del mundo de la noche

Los expertos advierten del peligro que corren especialmente los jóvenes por estas sustancias, que en su mayoría son derivados del MDMA, la cocaína o la ketamina

Tusi, Popper, Mexxy, Mefedrona o GHB: las nuevas sustancias del mundo de la noche

Madrid

España es un país donde la cultura de la fiesta está muy arraigada, sobre todo entre los más jóvenes. Como siempre ha ocurrido, el mundo del ocio nocturno, las discotecas y el desenfreno, lleva inevitablemente asociado el consumo de otras sustancias más peligrosas. Pese a que en España las más frecuentes son el alcohol, el tabaco y la marihuana, el movimiento de drogas como el éxtasis, las anfetaminas y otras pastillas ha dado lugar a nuevos compuestos que surgen de combinar varias sustancias, algunas de ellas todavía desconocidas.

Los jóvenes tienen una ventana cada vez más abierta a experimentar con las novedades que presenta la noche. Muchos de ellos lo reconocen abiertamente: “Yo he probado el LSD y te daba un subidón que te llevaba a una especie de éxtasis. Lo cierto es que estoy a favor de experimentar con estas sustancias, ¿por qué no?”, reconocía un joven. Otros, aunque han podido tener una buena experiencia, admiten que a veces hay que pagar las consecuencias: “Yo he probado el MDMA y la verdad es que bastante guay. Lo que pasa es que luego te da resaca emocional y estuve una semana que me quería tirar por el balcón”.

Discoteca

Discoteca

El abanico de sustancias cada vez es más amplio, ya que surgen nuevos compuestos derivados de los ya conocidos y otros que todavía están en investigación. Rosa Frías Martínez es fiscal de la Fiscalía Especial Antidroga: “En los últimos tiempos hemos observado un uso desmedido de lo que llaman cocaína rosa, la metanfetamina y sus derivados por supuesto, el éxtasis, la mefedrona y el GHB”.

"Algunos usuarios han manifestado usar el tusi en combinación con el LSD, lo llaman banana split"

—  Patricia Angulo, capitana de la Guardia Civil de la policía judicial del grupo especializado en tráfico de drogas

Hay dos sustancias en especial cuyo consumo se ha incrementado en los últimos meses, que son la cocaína rosa o tusi y el popper. Patricia Angulo es capitana de la Guardia Civil de la policía judicial del grupo especializado en tráfico de drogas: “Las aprehensiones de cocaína rosa han subido un 600% respecto al año pasado, de hecho solo en Baleares incautamos 13 kilos este verano. Al ser una droga sintética de la que no tenemos stock en España, es muy probable que esté llegando del centro y norte de Europa”. Y sobre el popper, que es una droga inhalable muy fácil de conseguir por internet Patricia asegura que las detecciones han aumentado un 500% en el último año.

"El problema es que muchas de estas nuevas sustancias se venden como éxtasis y los chavales las compran sin saber qué se están metiendo"

—  Helen Dolenhevich, psiquiatra del Hospital del Henares

La doctora Helen Dolenhevich es psiquiatra del Hospital del Henares y responsable del programa Patología Dual. Ella explica que las nuevas sustancias se venden como si fuesen MDMA o pastillas, pero la realidad es que llevan otros compuestos que las vuelven muy peligrosas.

Tusi

Se suele vender como “cocaína rosa” por su característico color y se parece mucho a la anterior, de hecho ambas vienen del 2CB (4-bromo-2,5-dimetoxifeniletilamina). Es una mezcla de ketamina, MDMA y cafeína, aunque su origen esta en las fenetilaminas. Tiene unos efectos más psicodélicos entre los que destacan las alucinaciones acompañadas de un estado de euforia y nerviosismo. Puede producir un nivel de adicción muy similar al de las anfetaminas. Esta sustancia suele moverse en ambientes más selectos y su precio roza los 100 euros el gramo.

Popper

Es una sustancia líquida incolora cuyos vapores se tienen que inhalar y suele venir en bote pequeños. Produce un fuerte efecto estimulante fuerte que dilata los vasos sanguíneos muy rápido, dando una sensación de subidón que dura en torno a los 15 o 20 segundos para después dar una sensación de bajón severa. Puede generar tolerancia, lo que implica un gran riesgo de sobredosis. El corazón también puede verse afectado porque aumenta de la frecuencia cardíaca de forma repentina.

Mefedrona

Se la conoce comúnmente como “mefe” o “miau miau” y produce un efecto similar al de la cocaína, las anfetaminas y el éxtasis juntos. Se puede encontrar en la web como abono o fertilizante de plantas. De ella están derivando nuevos compuestos como la 4-Metil-N-Etilcatinona (4-MEC), la bufedrona y la flefedrona. La doctora Dolenhevich explica sus efectos: “Da la sensación de que estás como cerquita de los demás, que el mundo es maravilloso. Puede provocar sintomatología psicótica, paranoias de que te persiguen, taquicardia e hipertensión”.

Nexus

Esta es la que más se suele vender como MDMA sin que el consumidor lo sepa, pero la realidad es que es una feniletilamina derivada de las anfetaminas. Produce unos efectos parecidos al LSD o el éxtasis y cuando se consume en exceso provoca una fuerte tolerancia, lo que puede incrementar su uso. Es una sustancia poco investigada que provoca mareos, náuseas o alucinaciones visuales, además de fuertes subidones del estado de ánimo.

GHB

Es una de las más recientes y su nombre técnico es Ácido Gammahidroxibutírico, aunque otros la llaman éxtasis líquido. Es un potente depresor del SNC (Sistema Nervioso Central) y presenta un riesgo especial para las mujeres, porque es muy común verla en situaciones de abuso sexual. “Se parece muchísimo el efecto al del alcohol, tiene un efecto acumulativo en el cerebro y provoca un apagón en tu conciencia. Te acabas cayendo al suelo y puedes entrar en estado de coma incluso”, cuenta la doctora Dolenhevich.

Mexxy

También conocida como metoxetamina, es una sustancia de síntesis química que puede producir alucinaciones auditivas y visuales. Desde hace 10 años se viene denunciando el aumento del su consumo, y no ha sido hasta recientemente que ha empezado a hacerse patente su existencia entre los expertos. La doctora Helen Dolenhevich habla sobre su procedencia: “Es un análogo de la ketamina y es una sustancia disociativa que se ha vendido también mucho en el mundo de la fiesta y se ha utilizado mucho como adulterantes de otras sustancias”.

Los hábitos saludables y un buen equilibrio en la vida de los jóvenes son vitales para evitar que tomen caminos tan peligrosos como este.

"Horas de sueño, deporte, una interacción social sana y sobre todo que tengan un pensamiento crítico que pueda realmente ayudarles a tomar las decisiones adecuadas respecto a su salud".

—  Azucena Retamero, responsable del Servicio de Información y Orientación de la Fundación FAD Juventud

Porque precisamente eso es lo que está en juego, su salud. Los jóvenes pueden disfrutar de la fiesta y el ocio sin necesidad de utilizar estas sustancias porque pueden pagar las consecuencias a un precio muy alto.

Por qué se mete en el mismo saco el sexo, las drogas y la violencia

Eduardo Hernández Ojeda

Periodista en el equipo de Economía de la Cadena...