El fin del efectivo
El dinero en metálico podría ser pronto cosa del pasado. Según el Banco de España, solo dos de cada tres compras realizadas en nuestro país se pagan en efectivo. Los pagos con tarjeta se han duplicado en los últimos dos años y el uso de aplicaciones móviles y herramientas como Bizum ya estan detrás del 3% de las compras. En el horizonte: la propuesta de un Euro Digital sobre la que ya trabaja el Banco Central Europeo. Analizamos el futuro del dinero con Luis Garvía, de ICADE Business School
El fin del efectivo
Madrid
La pandemia ha hundido el pago de compras en efectivo: si en 2019 el 83% de las operaciones se hacía con dinero en metálico, en 2022 han sido únicamente el 65% según los datos publicados por el Banco de España. El proceso, que "está siendo rápidisimo", según señala en Hora 25 de los negocios el profesor de finanzas en ICADE Business School, Luis Gravía, "ha sido catalizado con el virus".
"En apenas uno o dos años hemos evolucionado lo que hubieramos avanzado en diez o 20. Si esto no es el fin del efectivo, mucho se le parece", explica Garvía.
Además, aunque el número de operaciones el efectivo aguanta el tipo y se mantiene a la cabeza, el volumen de las transacciones en metálico es mucho más pequeño que el de los pagos con tarjeta. "Todo el efectivo se usa para movimientos muy pequeños, pero muy numerosos en proporción", explica el profesor.
La edad es muy relevante a la hora de elegir el método de pago: los más mayores son más fieles al pago en efectivo, aunque la tendencia también está cambiando. El 70% de los pagos que hacen los mayores de 65 años todavía es con dinero en metálico. Ahora bien, el uso de la tarjeta se ha triplicado en este grupo de edad en apenas dos años: en 2019 solo el 10% la usaba y ahora ese porcentaje asciende hasta casi el 27%.
El pilar de la economía sumergida
Hablar del uso del efectivo es hablar indirectamente de la trazabilidad de las operaciones y de la posible opacidad de las mismas. Sobre este punto también desprenden algunas conclusiones las cifras del Banco de España: si bien el 80% del pago de hipotecas, alquileres o seguros se hace a través de una domiciliación directa, todavía un 5% se hace con dinero en efectivo.
"El efectivo es el mejor aliado de la economía sumergida y el anonimato", explica Gavía, que concluye: "poco a poco la modernidad y la tecnología se acaban imponiendo".