Los libros que han marcado 2022: de Annie Ernaux a 'La ciudad de los vivos'
Repasamos algunos de los mejores libros del año para la redacción de la Cadena SER
Este 2022 el Nobel de Literatura ha rejuvenecido a una institución algo anquilosada. Annie Ernaux, escritora francesa de 84 años, recibía el galardón en un acto que leyó y se sintió como un premio colectivo. De esa alegría colectiva participaron muchas lectoras jóvenes que en Francia y en también en España, han conectado con la prosa seca, honesta y vívida de la autora de obras como Los años o Los armarios vacíos (Cabaret Voltaire). Una mujer obrera que ha llenado sus pequeñas novelas de intimidad y retratos femeninos que no solían ocupar las grandes páginas de la literatura.
El canon está cambiando. Lo vemos con Ernaux, pero también con el boom de las escritoras latinoamericanas. Una inercia que ya apuntábamos hace un año, pero que en 2022 ha tenido su coronación en el mundo anglosajón. Mariana Enríquez sigue conquistando países, Inglaterra se ha rendido a la escritora argentina y Samanta Schweblin gana el National Book Award de traducción por Siete casas vacías en Estados Unidos. Allí escriben también otras mujeres latinas, como la boliviana Liliana Colanzi con sus fantásticos relatos editados por Páginas de Espuma o Selva Almada, nominada para conformar la lista corta del premio Warwick Women, que celebra las traducciones de obras de mujeres al inglés. La española Irene Solà también ha entrado fuerte en el panorama internacional, ya que tanto la Biblioteca de Nueva York como The Guardian han seleccionado su novela, Canto yo y la montaña baila, publicada en España por Anagrama hace un par de años, como lo mejor de la temporada.
Sara Mesa publicó Familia, Lucía Lijtmaer Cauterio, ambas en Anagrama, Brenda Navarro Ceniza en el boca (Sexto Piso), Aroa Moreno La bajamar, relatos de mujeres que salen adelante gracias a la amistad femenina. También leímos la novela póstuma de Almudena Grandes, Todo va a mejorar, que nos ha dejado una especie de novela aviso, donde imagina un futuro aterrador para España, con la extrema derecha gobernando.
Ha habido debuts sorprendentes como el de , de Emily Ruskovich, una novela sobre un hecho terrible contada de una manera brillante con el paisaje como fuerza narrativa. Violeta Gil nos emocionó con Llego con tres heridas, su primera novela publicada en Caballo de Troya, con la que cierra su año como editor invitado el cineasta Jonás Trueba. Su historia personal, de nuevo el relato de uno mismo para llegar a lo universal, en la que cuenta el suicidio de su padre cuando ella era una niña y cómo eso afectó a su vida adulta. La autora sale del centralismo madrileño, otra tendencia que ha cogido fuerza este 2022 en al literatura y también en el cine. Esa descentralización esta también en otra de las sorpresas del año, Los sueños asequibles de Josefina Jarama, de Manuel Guedán. Una novela que recupera la figura de la pícara a la narrativa actual. Destaca la frescura de Supersaurio de Meryem El Mehdati. Y por supuesto la originalidad y el retrato social de una clase de Eva Cruz en Veinte años de sol.
Descentralización hay también en Lo demás es aire, de Juan Gómez Bárcena (Seix Barral), donde reconstruye la historia de Toñanes, el pueblo del cual procede, a partir de los personajes que lo poblaron desde la Prehistoria a nuestros días. A lo más desértico de Almería y Granada no lleva el guionista Fernando Navarro en Malaventura, un conjunto de relatos con influencias de Sergio Leone y el Romancero Gitano de Lorca.
Literatura que mira a otros ámbitos, a otros lugares con otras voces que conecta con los lectores y convive con la vuelta de los veteranos. Volvió Enrique Vila-Matas. Su vuelta fue una especie de renacer, tras una operación quirúrgica, publicó Montevideo, una vuelta a sus paseos por distintas ciudades, por citas, personajes, divagaciones, con Cortazar como invitado y con mucho humor. Volvió Fernando Aramburu con Los Vencejos (Tusquets) y Carlos Zafón con Love song (Salamandra). Descubrimos también la cara más tierna de Michel Houellebecq en Aniquilación de la mano de Anagrama. El escritor contó una historia de amor, de paternidad sin olvidar la disección política y social del mundo actual, llena de contradicciones. Otro hito de 2022 ha sido el regreso de Cormac McCarthy dieciséis años después con una novela doble que teje un universo de culpa en 'El Pasajero/Stella Maris'. Por supuesto, disfrutamos y mucho con Nostalgia, de Mircea Cărtărescu, editado por Impedimenta. Ojo al fenómeno de La Ciudad de los vivos, de Nicola Laioia.
Regresó también Santiago Lorenzo, nuestro enfant terrible. Después del éxito de Los asquerosos ha publicado Tostonazo (Blackie Books), una novela con el mejor título del año, que habla de la España actual, a través de un rodaje y de las ciudades de provincias. Están los magufos que votan a la extrema derecha y aquellos que ensucian el mundo del cine. La realidad social ha sido una constante en la narrativa europea, quizá alertada por la situación de crisis política y económica. También la literatura sobre Rusia y Ucrania. La guerra ha hecho que las editoriales publiquen ensayos, novelas de escritores de ambos países que sirven como asidero para los lectores ávidos de aprender y comprender lo que está pasando. Por ejemplo, La historia de Rusia, de Orlando Figues o Una historia breve de Rusia, de Mark Galeotti, editada por Capitan Swing. De Rusia y de Putin, habló mucho la escritora y premio Cervantes, Elena Poniatowska, que a sus 90 años ha presentado El amante polaco.
Los relatos basados en hechos reales, que juegan con la ficción y lo periodístico también han ido abundando, por ejemplo, Obra maestra de Juan Tallón (Anagrama), que contaba uno de los casos más extraños de la historia reciente en España: la pérdida de una escultura de Richard Serra de 38 toneladas. Tallón no solo juega con los géneros, usa el humor y configura un retrato social de un país. Eso mismo es lo que hace el italiano Nicola Lagioia en La ciudad de los vivos (Literatura Random House), uno de los fenómenos del año. Un libro sobre un asesinato real, que destapa el clasismo de la sociedad italiana.
Si en 2021 tuvimos los diarios de Rafael Chirbes, este 2022 nos ha traído los Diarios y cuadernos (1941-1995) de Patricia Highsmith también en Anagrama. Celosa de su intimidad, al punto de escribir este diario en varios idiomas, entre ellos el español, Patricia Highsmith retrató puntillosamente, desde su adolescencia a su muerte, su pasión por la escritura, sus problemas personales y sus amores clandestinos. Este ha sido un año convulso en el mundo del cómic, por un lado, están las pérdidas de figuras clave en el sector, como la de Carlos Pacheco, uno de los referentes. Por otro, el surgimiento de nuevas voces y miradas. De lo más destacado, el apocalíptico Fuego de David Rubín (Asteroide), el final de Paracuellos de Carlos Giménez (Reservoir books). El pacto (Nuevo Nueve), con el que Paco Sordo ganó el Premio Nacional. Destacable es también Hierba, de la coreana Keum Suk Gendry-Kim (Reservoir books), un retrato de las esclavas sexuales.
Sobre los ensayos, Paul B Preciado ha hecho que un libro sobre el COVID sea un libro sobre cómo cambiar el mundo. En Dysphoria mundi, (Anagrama) el escritor y filósofo propone una revolución, la de todos aquellos que no estamos invitados a la fiesta de la normalidad y la hegemonía. Un tratado divertido, inteligente y rompedor, que desmonta los géneros, los literarios y los otros, y nos pone en el espejo a todos los lectores. Otro de los ensayos que marcaron el año fue el de Begoña Gómez Urzaiz, Las abandonadoras, (Destino) sobre la maternidad.
Original es también la propuesta de Paco Cerdà en 14 de abril (Libros del asteroide). Un libro sobre la proclamación de la Segunda República, que es también un thriller, un relato periodístico, un trozo de historia. Habla de los nadies. De aquellos que no necesariamente salen en los libros de historia pero cuya vida cambió aquel día de 1931. También Libros del Asteroide nos trajo otro ensayo de regalo, No me acuerdo de nada, de Norah Efron. Otro evento editorial fue la edición de nuevo de Agua y jabón, de Marta Riezu. Capitán Swing nos reintrodujo en la ciencia ficción con Radicalizado de Cory Doctorow y en el debate sobre la alimentación con Sitopia, de Carolyn Steel, un tema que volverá y mucho en 2023.
Los recomendados de Pepa Blanes, jefa de Cultura
La ciudad de los vivos, Nicola Lagiola (Literatura Random House)
Dysphoria mundi, Paul B Preciado (Anagrama)
14 de abril, Paco Cerdá (Libros del Asteroide)
Familia, Sara Mesa (Anagrama)
Llego con tres heridas, Violeta Gil (Caballo de Troya)
Los sueños asequibles de Josefina Jarama, de Manuel Guedán (Alfaguara)
Oreo, Fran Ross (Pálido Fuego)
Mira esa chica, Cristina Aráujo (Tusquets)
Los recomendados de Daniel de la Fuente (La Hora Extra)
Las abandonadoras, Begoña Gómez Urzáiz (Destino)
La Bajamar, Aroa Moreno (Random House)
Hermanas, Daisy Johnson (Periférica)
Vengo de ese miedo, Miguel Ángel Oeste (Tusquets)
Un año y tres meses, Luis García Montero (Tusquets)
El último verano, Jota Linares (Planeta)
Lo que hay, Sara Torres (Reservoir Books)
Love Song, Carlos Zanón (Anagrama)
Lo demás es aire, Juan Gómez Bárcena (Seix Barral)
Los recomendados de Emma Vallespinós (La Ventana)
No me acuerdo de nada, Nora Ephron, (Libros del Asteroide)
Las abandonadoras, Begoña Gómez Urzaiz, (Ed. Destino)
Mira a esa chica, Cristina Araújo, (Tusquets)
No y mil veces no, Nina Lykke, (Gatopardo)
La bajamar, Aroa Moreno Durán, (Literatura Random House)
Pequeñas desgracias sin importancia, Miriam Toews, (Sexto Piso)
Un año y tres meses, Luis García Montero, (Tusquets)
Los recomendados de Eva Cruz (Hoy por Hoy)
Obra maestra, de Juan Tallón (Anagrama)
Las herederas, Aixa de la Cruz (Alfaguara)
El último hombre blanco, de Nuria Labari (Literatura Random House)
Malaventura, de Fernando Navarro (Impedimenta)
Lo demás es aire, de Juan Gómez Bárcena (Seix Barral)
Los recomendados de Antonio Nuño (A vivir que son dos días)
Todo va a mejorar, Almudena Grandes (Tusquets)
Lo demás es aire, Juan Gómez Bárcena (Seix Barral)
Tierras muertas, Nuria Bendicho (Sajalín Editories)
La bajamar, Aroa Moreno Durán (Literatura Random House)
14 de abril, Paco Cerdá (Libros del Asteroide)
El amante polaco, Elena Poniatovska (Seix Barral)
Vengo de ese miedo, Miguel Ángel Oeste (Tusquets)
Soy una tonta por quererte, Camila Sosa (Tusquets)
A mordiscos la orquídea, Joan Daròs (Niños gratis)
Peluquería y letras, Juan Pablo Villalobos (Anagrama)