Por qué China vive ahora la gran explosión de contagios de COVID-19 y cómo debemos interpretarlo
Aunque el gobierno dejó de dar cifras oficiales, la cifra de contagios de Covid-19 ha llenado los hospitales del país y en algunas regiones como Zhejiang, los han situado al borde del colapso con un millón de contagios diarios
Madrid
El gobierno de Xi Jin Ping anunciaba hace unas horas que la gestión de la COVID-19 pasa de tipo A a tipo B a partir del 8 de enero del próximo año. Esto significa que volverán a entrar en vigor medidas para proteger la vida y la salud de las personas después de que se hubieran levantado la mayoría de las restricciones el 7 de diciembre. Entonces se produjo un pulso de la ciudadanía contra el gobierno por las estrictas cuarentenas y controles a los ciudadanos ante el aumento de los contagios. Pero entre las medidas de control también se incluyen las de liberación del turismo. Se permitirá la llegada de extranjeros sin necesidad de cuarentena y con solo una prueba PCR. Los chinos también podrán salir del país, pero naciones como la India y Japón ya han anunciado que habrá medidas restrictivas para ellos y Estados Unidos las está estudiando.
Existe un temor real de que vuelvan a dispararse los contagios de la nueva variante del COVID-19 procedente de China. Pero, ¿qué pasa en China para que se produzca esta invasión de nuevos casos? Según los expertos, las vacunas chinas no han funcionado bien. No son del ARN mensajero, que son las que han demostrado una mayor eficacia, y China se niega comprar vacunas del exterior. Las que producen en el país asiático provocan muchos efectos secundarios y una buena parte de la población no ha querido vacunarse. Los mayores han preferido arriesgarse a enfermar con el virus que ponerse la vacuna y ahí esta su gran nicho de contagios ahora mismo.
Hay que tener en cuenta que en China hay una superpoblación de 1.400.000.000 habitantes. Solo en la región de Zhejiang, con 65 millones de habitantes, esta registrando mas de un millón de contagios diarios. En provincias menores como Quingdao, con mas de 10 millones de personas, los contagios superan los 500.000.
Con estas cifras, el país se va a centrar, según ha anunciado la comisión de control y prevención de enfermedades, en prevenir casos graves, aumentando la tasa de vacunación de ancianos y promoviendo la segunda dosis de inmunización de refuerzo en personas con enfermedades graves. Según cuenta Liang Wannian, el jefe del panel de expertos de esta comisión, las medidas son necesarias porque el 75% de los contagiados por COVID-19 están en estado grave, situando al sistema sanitario ante un desafío sin precedentes, ni siquiera en lo peor de la pandemia.
El temor actual en muchas zonas del planeta es que, en un momento en el que la pandemia del COVID-19 parece ya controlada y no necesita grandes medidas restrictivas, una nueva variante procedente de China vuelva a colocar al mundo en la casilla de salida tras dos largos años de lucha contra el virus.
En China, a la precaria situación actual hay que sumar la celebración del Año Nuevo Chino, que tiene lugar del 21 al 27 de enero. Es ahí cuando se espera que se produzcan millones de desplazamientos por todo el país, en plenas vacaciones de invierno. Los contagios podrían esparcirse hasta las zonas rurales, que hasta ahora se habían mantenido protegidas de esta nueva ola, que afecta principalmente a las grandes ciudades.
Victoria García
En la SER, desde hace casi tres décadas, con algunas ausencias. Antes en Antena3 Radio y TV. Trabajé...