"Muerte civil es un concepto que se queda corto": el régimen talibán asfixia los derechos de las mujeres afganas
La situación de las mujeres afganas empeora a marchas forzadas tras la conquista talibán de 2021. Las redes de ayuda internacional tratan de brindar apoyo a quienes huyen del país, pero la merma de derechos es simplemente abrumadora
"Muerte civil es un concepto que se queda corto": el régimen talibán asfixia los derechos de las mujeres afganas
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Madrid
El último atropello que cometieron los talibanes contra los derechos de las mujeres ocurrió hace dos semanas. El régimen que dirige Afganistán desde agosto de 2021, tras una conquista relámpago, prohibió el 20 de diciembre de 2022 que las mujeres pudieran acudir a las universidades. Este veto se une al que ya se estableció en octubre de 2021, cuando se impidió que las mujeres de más de 12 años pudieran tomar clases en institutos de secundaria. La situación es insostenible y son las redes de ayuda internacional las que tratan de hacer que todo se revierta.
Zajra es una mujer afgana que llegó a España en agosto de 2021. Su familia y amigas siguen en Afganistán. "No pueden hacer nada. Todos los días se quedan en casa y lloran, lo pasan mal", cuenta en Hora 25 con Marina Fernández. "Los talibanes no dejan a las mujeres que salgan a la calle sin un hombre. Con todas las dificultades y complejidades, antes de los talibanes sí podía ir a la universidad. Ahora no. Todo es oscuro en Afganistán. Nadie sabe qué va a ocurrir y los adultos están preocupados por sus niñas", relata Zajra.
Pilar Requena es periodista, autora de 'Afganistán' (Editorial Síntesis) y advirtió hace tiempo de que los talibanes "no habían cambiado". "Han aprendido a hacer política, a hacer propaganda, pero son los mismos que en los 90", señala. "La élite del país se ha ido y la que queda o bien está trabajando en la clandestinidad o piensa en irse. La resistencia, que es la única vía de salida que veo, es muy peligrosa. Cada mujer que va a una escuela, al instituto o a la universidad sería impensable si no tuvieran apoyo familiar", relata la periodista.
El trabajo de las activistas para que no se olvide la situación de las mujeres en Afganistán es diario e incansable. Inma Orquín es portavoz de Afgan Woman on the Run. "Tenemos bastantes familias que han podido llegar a España, mujeres solas también con hijos. Algunas están en Pakistán, Irán y la India. Lo están pasando muy mal porque muchas son ilegales en esos países. No suelen extender visados. Algunas hablan incluso de suicidio", cuenta Orquín. Inés Herreros viajó a Afganistán en representación de la Unión Progresista de Fiscales. "Muerte civil se queda incluso corto", dice Herreros. "Su misoginia llega a unos niveles insostenibles, es querer borrarlas del mapa", añade Pilar Requena.