Un plan de choque sectario que solo beneficia a los suyos

Madrid

Feliz año, Sastre. Feliz año para todos en este lunes, en el que puestos a estrenar cosas, también arranca el tercer paquete de medidas anticrisis, que tampoco ha gustado al Partido Popular. Y tengo que decir que me parece que tienen razón, porque viendo el nuevo plan de choque, creo que al Gobierno no le hubiera costado nada cambiar un par de detallitos sin importancia para que estas ayudas también contentaran a los populares.

Por ejemplo, la reducción del IVA para los alimentos de primera necesidad está bien, pero cuidado, porque solo incluye productos como las frutas, el pan o la leche. El Gobierno podría haber tenido un detalle con la derecha, incluyendo también el carabinero tronco de Huelva, el entrecot de vaca rubia gallega madurada durante 60 días y un IVA súper reducido para los libros de Vargas Llosa.

O como la bonificación del combustible que desde ayer se mantiene únicamente para el transporte profesional por carretera. Pedro Sánchez podría haber tenido un gesto con la oposición simplemente incluyendo en este descuento a todos aquellos vehículos que estén yendo a misa o a ver los toros, pero el Gobierno ha preferido aprobar un plan de choque sectario que solo beneficia a los suyos.

Y sigo. La congelación de los contratos de alquiler hasta el verano del 23 hubiera sido una medida menos excluyente si afectará también a los bungalows de Sotogrande y Puerto Banús con jacuzzi climatizado y bodeguero con termostato de porcelana. Porque la crisis está afectando al bolsillo de muchos españoles, es verdad, pero también al bronceado de los otros. No costaba tanto aprobar un Ford mínimo vital para aquellos núcleos familiares que acrediten llevar más de 3 años sin hacer snow en la semana blanca y que se pudiera cobrar en metálico o en sobre.