El Tribunal Supremo de Irán ha confirmado el pasado sábado la pena del vigésimo ciudadano del país que será ejecutado en la horca por su participación en las protestas contra el régimen de la República Islámica. Mohammed Boroghani, de 19 años, ha sido procesado por presuntamente haber causado lesiones con un arma a un agente de las fuerzas de seguridad durante las movilizaciones que vive el país desde la muerte en septiembre de la joven Mahsa Amini por llevar mal colocado el velo en la vía pública. El hombre ha sido condenado por «hacer la guerra a Dios y el Estado» y por ser el responsable, según la sentencia, de la quema de un edificio público. Las organizaciones de Derechos Humanos denuncian que una vez que estos procesos sumarios en que se condena a muerte a los manifestantes son confirmados por el Tribunal Supremo iraní, ya no cabe recurso alguno que frene la decisión. Por el momento, son dos los manifestantes que han muerto en la horca por su participación en las movilizaciones civiles contra el régimen de los ayatolah y sus acciones contrarias a los derechos humanos. El joven Mohsen Shekari murió ahorcado el pasado 8 de diciembre. Por su parte, Majid Reza Rahnavard fue colgado de una grúa en la vía pública el día 12. Además, más de 500 personas han muerto durante las protestas, aseguran grupos de defensa de los Derechos Humanos, que han condenado la violencia utilizada por las fuerzas represoras contra los ciudadanos persas. El pasado fin de semana, durante el funeral de uno de los manifestantes, se vivieron graves momentos de tensión ya que la policía trató de disolver a la fuerza el multitudinario acto que tuvo lugar en la ciudad kurda de Yavanrud. La fiscalía iraní ha dejado este lunes en libertad a los jugadores de fútbol que fueron detenidos tras haber asistido a una fiesta mixta en la ciudad de Damavand, a 74 kilómetros de Teherán. Las autoridades judiciales de la República Islámica han anunciado que presentarán cargos contra todos los participantes en la fiesta. De momento, no se conoce las identidades ni el número de personas que asistieron al evento festivo.