Desvelan la última mentira del congresista republicano acusado de falsear su vida: su madre no huyó de los atentados del 11-S
Los republicanos aumentan la presión sobre el congresista George Santos por sus mentiras y exigen su dimisión
El republicano George Santos, actualmente bajo investigación federal, tras reconocer que había mentido al redactar su curriculum. / WILL OLIVER (EFE)
Madrid
Compañeros republicanos del congresista George Santos, recién designado como miembro de la Cámara de Representantes, han aumentado en los últimos días la presión pidiéndole abiertamente que dimita por la cascada de mentiras que vertió en la campaña electoral sobre su trabajo, estudios y también sobre su vida personal.
Santos ha exagerado o directamente metido sobre su currículum tanto profesional como personal, con una falsa herencia judía vinculada al Holocausto y una madre que supuestamente había estado presente y había conseguido escapar en los atentados del 11 de septiembre de 2001 —una historia que los registros de inmigración han desmentido recientemente, ya que su madre no estaba en el país en el momento del atentado—, entre otras mentiras que han salido a la luz.
Los republicanos que representan en distintos ámbitos al condado neoyorquino de Nassau, entre ellos el congresista Anthony D'Esposito, pidieron el miércoles a Santos que dimita y en los últimos días la lista se ha ido ampliando. Solo en el Capitolio hay ya seis compañeros que le reclaman que se vaya.
El último en hacerlo ha sido Max Miller, el jueves, que ha apelado a "los máximos niveles de honestidad y fiabilidad" que se le presuponen a un congresista. "No está bien inventar o mentir por intereses políticos", ha afirmado en un comunicado recogido por el portal Cleveland.com.
Santos, sin embargo, ha hecho caso omiso a las voces críticas de varios de sus compañeros, alegando que fue elegido para servir a los ciudadanos, "no al partido ni a los políticos". En un mensaje publicado el pasado 11 de enero, Santos también aseguró que seguía "comprometido a hacerlo [servir a los ciudadanos]" y lamentó escuchar que "los funcionarios locales se niegan a trabajar con mi oficina para lograr resultados que mantengan segura a nuestra comunidad y reduzcan el costo de vida": "¡No dimitiré", insistió.
Cuenta con el aval velado del flamante presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, que ha pasado de puntillas por la que es una de sus primeras polémicas. "Los votantes de su distrito le eligieron. Ha tomado posesión y forma parte de la conferencia republicana", esgrimió el jueves ante los medios.
