"Somos muy hijas de puta o somos muy blandas": Verónica Fumanal, sobre lo que pasa con las mujeres que llegan al poder
En 'El Abierto' de 'Hoy por Hoy', Verónica Fumanal, Javier Aroca y Carlos Navarro Antolín analizan la dimisión por sorpresa de la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern
Los analistas de 'El Abierto' han debatido sobre las formas de liderar en política y el machismo con el que conviven las mujeres como la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern. "Las mujeres sufren un doble rasero espectacular, ¿cuánto más se va a atacar a las mujeres por estar en el poder?", decía Verónica Fumanal mientras destacaba las diferencias sociales y machistas que hay entre los hombres y las mujeres a la hora de liderar un país: "los hombres siempre tienen el liderazgo adecuado y especial, el testosterónico".
Verónica Fumanal: "O somos muy hijas de puta o somos muy blandas"
10:41
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1674116421400/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
La prensa conservadora de Nueva Zelanda, tras conocer el anuncio de dimisión de Arden, hablaba de ella como "la llorona". Y a raíz de este titular Javier Aroca se pregunta si le dirían lo mismo a un ministro, ¿le dirían llorón a un hombre? Los tres analistas han coincidido en una idea: Jacinda Ardern ha sido un ejemplo "de honestidad y nobleza y nos da una visión de la política más humana", afirmaba Carlos Navarro-Antolín.
Anuncio por sorpresa
La primera ministra de Nueva Zelanda, la laborista Jacinda Ardern, anunció este jueves inesperadamente que dejará su cargo el próximo febrero, pues no tiene "la energía" para presentarse a la reelección el próximo octubre.
Más información
Ardern, de 42 años, hizo el anuncio durante una reunión del Partido Laborista en la ciudad oriental de Napier, en la que aseguró con voz trémula: "No tengo suficiente energía para seguir con el trabajo. Es el momento". Ardern se convirtió en la mujer dirigente más joven del mundo cuando fue elegida primera ministra en 2017 a los 37 años.
Durante su mandato, Nueva Zelanda se ha enfrentado a numerosas dificultades, recordó ella misma hoy, como la pandemia de covid-19, el atentado en dos mezquitas en Christchurch en 2019, que dejó 51 fallecidos, o la erupción del volcán White Island ese mismo año. Su gestión y reacción tras el atentado fue especialmente aplaudida, prohibiendo después las armas semiautomáticas utilizadas durante el ataque y reformando las leyes de posesión de armas.
Pero su fulgurante carrera se ha visto en los últimos tiempos impactada por la pandemia de covid-19, a la que el gabinete de Ardern hizo frente con uno de los cierres de fronteras más estrictos del planeta, así como el actual azote de la inflación.
"Soy humana, los políticos somos personas. Para mí, ha llegado el momento", justificó hoy Ardern, afirmando que su país está "en un mejor lugar" ahora en varias áreas que hace años, entre ellas en la lucha contra el cambio climático. La política aseguró que espera dejar como legado que "se puede ser amable y fuerte, y también ser el tipo de líder que sabe cuándo es el momento de marcharse".