Por qué la víctima de la supuesta violación de Dani Alves ha renunciado a la indemnización: "Las víctimas pagarían dinero para evitar este juicio público"

El futbolista brasileño Dani Alves ha pasado su primera noche en la cárcel de Brians II. La Generalitat ha decidido cambiarlo de prisión a una con módulos más pequeños para garantizar "la seguridad en la cárcel". En las últimas horas, el jugador ha contratado para su defensa a uno de los abogados más reputados en derecho penal. La mujer supuestamente violada por el futbolista ha tenido que renunciar explícitamente a la indemnización que le correspondía para que no se dude de ella.

El juicio público

La escritora Nuria Labari ha publicado en El País el artículo 'Violada pero no indemnizada', en el que denuncia la decisión que ha tenido que tomar la víctima para evitar un "segundo juicio", el de la sociedad. Labari ha asegurado este martes en La Ventana que "las víctimas de violaciones pagarían dinero para evitar este juicio público".

Lamenta que "estamos lejos de cambiar ese segundo juicio". Pone el caso de la escritora argentina Belén López Peiró que en 2021 publicó 'Donde no hago pie', un libro en el que analiza las secuelas de haber denunciado a su tío, que la violó en varias ocasiones cuando era joven. Labari explica que la familia de López Peiró y todo su entorno dudó de ella y defendió a su familiar.

El protocolo 'No callamos'

Nuria Labari se muestra contenta porque el protocolo de agresiones sexuales se cumplió a rajatabla en la discoteca. Indica que los comentarios en tertulias de aquellos que no creen a la víctima son muy hirientes. "A una mujer la violan en el momento que la violan, no cuando lo dice un juez", asegura. Explica que a la gente le cuesta creer que un amigo cercano o, incluso, un familiar pueda ser un agresor sexual. "Cualquiera puede ser un violador. También un familiar, un futbolista, un jefe o una buena persona", cuenta.

Labari considera muy positivo que haya hombres que estén denunciando a Dani Alves y que un caso como este tenga espacio en los medios de comunicación tradicionales, algo impensable años atrás. En este caso, el protocolo que se ha seguido ha sido el 'No callamos', impulsado por el Ayuntamiento de Barcelona.

Marca que lo primero es atender a la víctima en el lugar de los hechos, más allá de perseguir al autor del delito. Es entonces cuando se le informa de los derechos que tiene y de los servicios disponibles. Después el responsable del local debe avisar a los Mossos d'Esquadra para tomar declaración a la víctima y acompañarla si quiere denunciar.

Solo se denuncian el 8% de los ataques sexuales

Según el último balance del Ministerio del Interior, de enero a septiembre de 2022 hubo más de 13.000 denuncias; esto son 48 al día y dos cada hora. Respecto a 2021 las violaciones aumentaron un 38%. Los datos de la macroencuesta del Ministerio de Igualdad sobre violencia señalan que solo se denuncian el 8% de los ataques sexuales.

La vergüenza, el miedo a no ser creídas y el miedo a los agresores son algunos de los motivos que explican estos niveles de infradenuncia. El 70% de los agresores son amigos o familiares. Es decir, están en el entorno de la víctima.