Con luz y taquígrafos

Madrid

Ni la Constitución ni ninguna ley exige en España la aprobación del Congreso de los Diputados para enviar armamento a otro país. Así pues, el envío de tanques Leopard a Ucrania no exige la autorización de las Cortes. Otra cosa sería el envío de tropas, que según la ley de Defensa, debe ser discutida y aprobada en el Congreso y, por supuesto, la declaración del estado de guerra con cualquier otro país que exige la firma del rey, la del presidente del Gobierno y la autorización expresa de las Cortes Generales.

Pero una cosa es que no sea obligatorio ni necesario discutir en el Congreso el envío de los tanques y otra que no sea conveniente e incluso pedagógico que ese debate se produzca. Primero porque ayudaría a devolver protagonismo político al Parlamento y segundo porque la discusión razonada de cualquier tema ayuda a su mejor comprensión por los ciudadanos. Cierto que mostraría el desacuerdo interno entre los socios del gobierno, puesto que Unidas Podemos ya ha anunciado su disconformidad, pero el envío de tanques Leopard entra dentro de la lógica de la solidaridad y cohesión que deben mostrar los países europeos frente a la invasión llevada a cabo por Putin y la decisión puede ser perfectamente argumentada y seguramente defendida por una amplia mayoría parlamentaria. Con luz y taquígrafos.