España cae en el índice de corrupción de Transparencia Internacional hasta niveles de Botsuana y Cabo Verde
Nuestro país ha caído un puesto en 2022, y se sitúa en la posición número 35 de 180 países analizados
España ha caído sesenta puntos en el índice anual que elabora la ONG Transparencia Internacional sobre la percepción de la corrupción. Nuestro país ha caído un puesto en 2022, y se sitúa en la posición número 35 de los 180 países analizados. Es el segundo año consecutivo en el que desciende, lo que deja a España al mismo nivel que países africanos como Botsuana o Cabo Verde. La organización reclama a nuestro país que se avance en las reformas pendientes. Manuel Villoria, miembro del comité de dirección de Transparencia Internacional, explica que descender durante dos años seguidos "indica que no se avanza en la lucha contra la corrupción".
En los últimos años, tanto la Unión Europea, como el Consejo de Europa, o la OCDE, abundan en la necesidad de nuestro país para hacer reformas que alejen a las instituciones de las prácticas corruptas. "No acabamos de establecer las normas y de implementar adecuadamente las que nos piden", sentencia Villoria. España tiene pendiente transponer la Directiva europea de protección a los alertadores, establecer buzones de denuncia en las oficinas públicas en todas las administraciones, modificar de la Ley de conflictos de intereses, una norma para regular relaciones con los lobbies, o reformar la Ley de Transparencia.
A estas recomendaciones legislativas, la ONG suma la necesidad de mejorar cómo se relacionan el poder político y el judicial. "Hay muchas tensiones con el Consejo General del Poder Judicial. Ahí se ve que los partidos políticos siguen obsesionados con controlar todos los órganos de control, no solo el CGPJ, también el Tribunal de Cuentas, o los nuevos órganos que se pretenden crear con nuevas regulaciones", subraya el también catedrático. "Todo esto, explica que no nos den la puntuación que un país como España necesita para mostrarse ante el mundo con una imagen de honestidad y de modernidad", cierra.
La puntuación de otros países
Hungría se ha convertido en el país más corrupto de la Unión Europea, superando a Bulgaria en el ranking anual. Según el informe, el Estado "ha sido capturado por el Gobierno", que controla órganos como la Fiscalía, la Auditoría Nacional o la Oficina de Impuestos. También destacan la deriva judicial en para lograr el control a los jueces. El estado centroeuropeo cae hasta 42 puntos, y se sitúa en la posición 77 de 180. De otros estados europeos, aunque fuera de la Unión, destaca la caída de 73 Reino Unido en el índice, hasta su puesto más bajo en la historia (el 18). En este caso, destacan, los años de Gobierno de Boris Johnson y la pandemia han juzgado papel fundamental. La Oficina Nacional de Auditoría, por ejemplo, ha descubierto que uno de cada cinco contratos tenía problemas. "En Reino Unido existe una conexión es muy peligrosas entre la política y los grandes grupos de interés", subraya Villoria. Por el contrario, los países nórdicos lideran la tabla por sus buenas prácticas son Dinamarca (90 puntos), Finlandia (87), Noruega (84), o Suecia (5).
¿Qué mide el índice?
Cuando se habla percepción de la corrupción no se refiere a una encuesta sobre cómo los ciudadanos ven a sus propios estados. El índice de Transparencia Internacional se elabora con los análisis de trece instrumentos diferentes de consolidado prestigio, como el índice de democracia del semanario británico The Economist, o del Foro Económico Mundial.