El “procés”, enterrado

Barcelona

El pacto presupuestario entre Esquerra y los socialistas catalanes tiene muchos efectos. Económicamente, habrá presupuesto, y además, con inversiones expansivas: Cataluña podrá volver a lanzar proyectos importantes (como dotar de más capacidad al aeropuerto barcelonés, que se quedaba pequeño), y, por tanto, a tirar del carro de la economía española.

Además, se ha roto la política de bloques, que es lo que alimentaba el “procés”, o sea, la división de la sociedad catalana, el unilateralismo y la confrontación ilegal. Desde ahora, el “procés”, ya no solo está muerto, sino también enterrado (lo que no implica que no haya gente con aspiraciones indepes). Como ha dicho el portavoz de los de Puigdemont, “Esquerra ha abandonado la mayoría independentista”: o sea, que ya no es mayoría. Adiós, muy buenas.

Y de paso, el acuerdo facilita que los republicanos sigan apoyando las últimas leyes importantes de la legislatura española. Como el segundo tramo de la reforma de las pensiones, esencial para que siga fluyendo el dinero de los fondos europeos de recuperación.

La única reacción extemporánea ha sido la del presidente de los populares, Alberto Núñez Feijóo, atribuyendo al PSC que por pactar un presupuesto “ya no es el partido constitucionalista”. El heredero de Manuel Fraga, olvida que el viejo franquista votó contra el título octavo de la Constitución, redactado por el socialista catalán Jordi Solé Tura y por el catalanista Miquel Roca. Su ignorancia sobre Cataluña resulta infinita. Quizá porque el PP está prácticamente desahuciado en esta comunidad, y carece de nativos que le aconsejen: solo tiene uno de sus 946 alcaldes; 1 de los 48 diputados catalanes al Congreso y 3 de los 135 diputados autonómicos. Siga despreciándoles.

Escucha todas las miradas de Xavier Vidal-Folch