La voz de la esperanza en Turquía: así ha sido rescatada por los voluntarios españoles una mujer tras más de 48 horas entre escombros
El enviado especial de la SER y jefe de Internacional, Pablo Morán, presencia el rescate de una mujer a manos de voluntarios españoles en Turquía
La voz de la esperanza en Turquía: así ha sido rescatada por los voluntarios españoles una mujer tras 48 horas sepultada entre escombros
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Madrid
"Sí, acabamos de hablar. Están tres. Una viva y las otras a lo mejor están muertas", dice uno de los rescatistas españoles en Adiyamán, una de las ciudades turcas afectadas por el terremoto. Otro le pregunta, veloz:
- "Vale, entonces cuando hablas con ella así, ¿responde hacia allá?".
+ "A la izquierda hacia arriba".
Los voluntarios españoles están a punto de efectuar un nuevo rescate, uno que va a terminar en final feliz, y se coordinan minuciosamente para que la operación transcurra con efectividad. Tras un día agotador, que comenzó salvando a un joven de 28 años, la jornada no ha sido tan positiva. Han pateado varias zonas, arrasadas por los escombros, pero no ha habido suerte. Hasta el final de la tarde, cuando vuelve a abrirse un hilo de esperanza. Un edificio derruido, a pocos metros del campamento base, en el que puede que haya 3 o 4 personas entre los escombros.
El enviado especial de la Cadena SER y jefe de Internacional, Pablo Morán, ha sido testigo de ese momento y ha hablado con uno de los rescatistas, Ramón Pérez Ibáñez, uno de los dos coordinadores del grupo. La voz de la mujer entre los escombros ha sido la clave para poder sacarla con vida: "Es una intuición personal, tal y como ha respondido, con esa vivacidad, entendemos que está en buen estado. Ha tenido suerte". Ahora viene lo peor, el escrupuloso procedimiento para que todo salga bien. "Hemos abierto una vía salvando obstáculos en una galería horizontal hasta que accedemos a ella".
Posteriormente también han conseguido rescatar a una joven de unos 14 años y también han conseguido rescatar a su padre. Han tardado varias horas en efectuar este rescate. A ambos los están asistiendo para que puedan recuperarse.
No hay tregua. Son horas y horas de trabajo sin descanso, en busca de más afectados. Se hace en condiciones muy duras, porque a la absoluta devastación del terreno, se suman las temperaturas gélidas del lugar. Adiyamán es el epicentro de un seísmo que ya acumula más de 11.500 muertos y 54.000 heridos y que va subiendo sin parar conforme avanzan las labores de rescate.
A la par que van pasando las horas desde que ocurrió la tragedia, en Turquía crecen las voces críticas hacia la gestión del presidente Recep Tayyip Erdoğan. Cuestionan la tardanza y la falta de ayuda en algunas zonas. Erdoğan reconoce que hay problemas para llegar a algunos puntos del país y lo justifica afirmando que nadie está preparado para que ocurra una tragedia así y llama a la unidad en estos momentos.
Complicada la situación en Siria
Turquía es el país más afectado, pero también es complicada la situación en Siria. Tras años de guerra, buena parte de la población ya se encontraba en una situación muy debilitada y vulnerable. En el país hay más de 2.000 miles y, aparte de estos datos, otras 300.000 personas han tenido que abandonar sus hogares en las zonas que controla el régimen de Al Asad.
A todo esto se suma las complicaciones para hacer llegar al país sirio la ayuda humanitaria, porque siguen en vigor sanciones contra el régimen. En España, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha pedido un esfuerzo para ayudar también a Siria. Mientras tanto, la Unión Europea ha anunciado un envío de ayuda al país por valor de tres millones y medio de euros. La OMS también ha enviado ayuda y la ONU espera suministrar este jueves desde Turquía ayuda áreas del noroeste de Siria, bajo control de la oposición y afectadas por los terremotos, y que hasta ahora no han recibido asistencia.