Así es el Mundial de Clubes que planea la FIFA para 2025: más equipos y cada cuatro años

Un año más, hemos vivido el Mundial de Clubes. Este se ha tenido que disputar en febrero de 2023, cuando se solía realizar a finales del mismo año en el que se dilucidaban la mayoría de campeones continentales, pero la celebración del Mundial de Qatar en mitad de la temporada hizo que se tuvieran que modificar las fechas para adecuar un calendario que cada vez está más saturado.

El formato es el mismo que se lleva a cabo desde hace unos años, con siete equipos correspondientes a las diferentes confederaciones del mundo, con los equipos campeones del máximo torneo continental de cada lugar, además de un anfitrión, en total siete equipos. Este modelo vino a sustituir a su predecesora, la Copa Intercontinental.

En ella se medían los que se consideraban los mejores equipos del mundo, de Europa y de Sudamérica, es decir, los ganadores de la UEFA Champions League y de la Copa Libertadores. Pero a partir de 2005 la FIFA decidió dar una vuelta de tuerca a la competición para hacerla más atractiva, añadiéndole rondas eliminatorias y más equipos de otros continentes. Y la cosa no queda ahí, 20 años después, el desde entonces bautizado como Mundial de Clubes volverá a cambiar.

Nuevo formato con más equipos en el Mundial de Clubes

"Arrancará en 2025, con 32 equipos, los mejores del mundo. Esa ventana, que en el pasado era para la Copa de Confederaciones, durará un poco más, claro, porque hay 32 equipos. Todos los detalles se van a debatir y concretar en las próximas semanas". Eso fue lo que anunció el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, el pasado mes de diciembre, justo antes de que se jugara la final del Mundial de Qatar, que ganaría Argentina a Francia en la tanda de penaltis.

Así, a partir de 2025 el formato pasaría de los siete participantes actuales a 32, como los Mundiales de selecciones, por lo que se prevé que se dispongan ocho grupos de cuatro equipos en los que se clasifiquen los dos primeros para la siguiente ronda. Después de ello, octavos, cuartos, semifinales y final, a partido único, tal y como vemos con las selecciones.

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Además del número de clubes participantes (cuyo reparto en las diferentes confederaciones está todavía por ver) el principal cambio es que dejaría de jugarse anualmente para hacerlo cada cuatro años. Todo ello implicaría una carga importante de partidos para los jugadores y encorsetaría aún más unos calendarios de por sí bastante repletos en la actualidad, pero la intención de la FIFA es que sea "como una Copa del Mundo, pero en versión clubes" para sacar mayor rentabilidad económica y dotar de más atractivo a la competición, que se llevaría a cabo en verano, atendiendo al detalle de que se encuadrará en la habitual ventana de la extinta Copa de Confederaciones.

Otro aspecto que está encima de la mesa es el de eliminar las prórrogas, con el fin de quitar un poco de carga de minutos en las piernas de los futbolistas. Esto implica que, de haber empates en los partidos, el ganador se decidiría directamente en una tanda de penaltis, obviando los habituales 30 minutos de tiempo extra.

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El coronavirus frenó un primer intento de cambio

Pero los cambios en el formato del Mundial de Clubes no es algo que se planeara directamente para dentro de tres años, sino que se viene gestando desde antes, es más, la idea era que en 2021 se implantara un nuevo modelo, así lo aseguró Infantino. "Hace algunos años decidimos un nuevo torneo masculino, una copa de clubes que iba a empezar en 2021, pero que no se celebró por la covid".

Esa vez fue la pandemia quien frenó la nueva competición, pero les ha servido para dar una vuelta de tuerca a lo que se iba a llevar a cabo ese año. Y es que, lo que tenían en mente implementar era un 'Mundialito' de 24 equipos, repartidos en ocho de Europa, seis de la CONMEBOL, tres de la CONCACAF, tres de África, tres de Asia y Oceanía, y un conjunto anfitrión, que en la frustrada primera edición de hace dos años iba a ser China.