Nueve de cada diez enfermeras denuncian que a menudo soportan comportamientos ofensivos en su puesto de trabajo

Madrid

"Eh tú, chica, morena o guapa" son algunas de las formas en que los pacientes se dirigen a las enfermeras según una encuesta del sindicato de enfermería SATSE, que refleja que el 90 por ciento del colectivo sufre, de manera constante, faltas de respeto. "Creo que a otras categorías profesionales no se dirigen así. Le dicen 'doctor' o les tratan de usted mientras nosotras tenemos que soportar estereotipos sexistas y retrógrados", asegura Sonia Núñez, enfermera en el Hospital Clínico Universitario de Valladolid.

A veces no solo son palabras, también comportamientos ofensivos y denigrantes como el que describe Arantza Sierra, enfermera en el Hospital Universitario de Araba: "He vivido situaciones de intento de agresión con el palo de un gotero simplemente por decirle a un paciente que tenía que tomarse una medicación. Estoy convencida de que si en vez de ser yo es un compañero chico, un enfermero el que se lo pide, seguramente no hubiera pasado".

Enfermeros como Víctor Manuel Pérez -que trabaja en el Complejo Hospitalario Universitario de Pontevedra- lo confirman: "Entre una compañera mía y yo, en igualdad de condiciones, a mi me tratan física y verbalmente con más respeto solo por ser hombre. Y es algo que no entiendo porque tenemos la misma profesión y a veces mi compañera lleva 30 años trabajando y yo empecé ayer ".

Un 84% de las enfermeras y enfermeros opina que el estereotipo más presente es que aún sea crea que la enfermería es una profesión “dependiente” de otro colectivo sanitario y un 92% opina que no tienen el reconocimiento y la visibilidad social que les corresponde por su responsabilidad, cualificación y competencia profesional. "Siempre tienes casos de gente que no se fía de lo que le estás diciendo: mejor que venga el médico, tú debes de ser de prácticas, mejor que venga alguien más mayor", explica Lucía Álvarez, enfermera en el Hospital Universitario Central de Asturias.

Los resultados de la encuesta de SATSE concluyen que es mayor el porcentaje de enfermeras y enfermeros que denuncia la existencia de estereotipos sexistas y retrógrados vinculados con su profesión con respecto a hace cinco años que se realizó otro sondeo similar. En concreto, ahora lo entiende así cerca del 90 por ciento mientras que en 2018 era el 87 por ciento.

“El hecho de que sean más las enfermeras y enfermeros que denuncian ahora esta inaceptable realidad denota que el paso de los años no ha conllevado una mejora de la situación, sino un empeoramiento, lo que demuestra que estamos fallando como sociedad a la hora de reconocer y tratar como deberíamos a todo un colectivo profesional por el mero hecho de estar conformado de manera mayoritaria por mujeres”, señalan desde la organización sindical.