Iván Ferreiro: "Para componer canciones hay que ser muy egoísta y no pensar jamás en el público"
"Yo no creo que se pague un precio por hacer lo que uno quiere (...) Creo que hay más sacrificio en hacer lo que no quieres".
E Iván Ferreiro cogió su fusil
Madrid
Para empezar, una primera declaración de intenciones, luego de siete años de silencio sin publicar un disco nuevo: "Después de esta época de pandemias, volcanes y guerras, la verdad es que dan ganan de meter la cabeza en un agujero como las avestruces". A continuación una definición que remite al título de este trabajo, "Trinchera pop", y que en el caso de Iván Ferreiro se llena enseguida de definiciones y metáforas: "La trinchera es un lugar que te sirve para todo: atacar, defenderte, para avanzar o retroceder. Y después es el lugar que remite a uno mismo. Una trinchera está llena de los libros que has leído, de las películas que has visto, de las risas que te has echado con los demás y de las canciones que nos han emocionado"
Un lugar combativo con la estética de todo eso, pero sobre todo para Iván Ferreiro con la ética personal del compromiso. "No hay trinchera que sirva si no está hecha de compromiso. En mi caso del compromiso con tratar de hacer la mejor canción de todas las posibles", asegura convencido. De ahí se explica el silencio de casi una década. No buscaba el músico gallego un disco más, sino el mejor que había hecho. "La música es una lucha con uno mismo. No voy a cantar contra nadie, sino contra mis posibilidades. Si todo el tiempo -sostiene Ferreiro- te estás preocupando de lo que hacen otros grupos, ya estás palmando. Para componer canciones hay que ser muy egoísta y no pensar en el público porque primero te tienes que emocionar a ti mismo".
Un disco mejor y con argumentos y caminos distintos. "En 'Trinchera pop' hemos hecho un disco sin pretenderlo. Hemos huido de los acordes de siempre, del pianito o la guitarra y pensamos en nuevos recursos, en nuevas músicas, hemos jugado un poco al reciclaje". Por esa razón en este disco encontrarán a la música de Vivaldi o a los acordes del mítico programa 'El hombre y la tierra' y la voz del no menos carismático Félix Rodríguez de la Fuente. "Siempre he relacionado el ecologismo con el feminismo, que para mí son los dos temas más importantes de nuestra época. Y decidimos que una de las canciones contará con esa voz y esa llamada al ecologismo y la naturaleza. Al fin y al cabo como persona nacida en los setenta, yo he decepcionado bastante a Feliz Rodríguez de la Fuente. Éramos una generación que en prime time teníamos un programa de ecología y no hicimos absolutamente nada".
Tampoco ha huido Ferreiro en la conversación de su antigua relación con la depresión. De eso habla también el primer single de "Trinchera pop", 'En el alambre'. "Hay que aprender a saber caer cuando se está en el alambre" e incluso ha ido más lejos: "También hay que saber tirarse, aunque eso muchas veces está mal visto. Yo creo en la rendición épica". Y sobre el paso del tiempo, respecto a las enfermedades mentales, por comparación asegura: "En mi época las enfermedades mentales eran un síntoma de fragilidad, mientras que ahora forma parte de la conversación".
Es, pues, el Iván Ferreiro más personal y auténtico, un músico que no negocia con el criterio y las ideas. "Yo no creo que se pague un precio por hacer lo que uno quiere, pero sí que es cierto que igual si te dejas llevar tienes unos premios diferentes. Y creo que hay más sacrificio en hacer lo que no quieres, aunque eso te reporte más "likes" o mucho más dinero, que meterse en líos como hago yo, que digo y escribo lo que no debo y porque nunca saco el disco que debería".
Iván Ferreiro, el dueño de su trinchera.
Sergio Castro Salillas
Redactor y guionista en la SER desde 1996. Estuvo...