La ONU denuncia que los talibanes han arrasado 20 años de progresos en los derechos de las mujeres
Con motivo del 8 de Marzo, Naciones Unidas alerta de que el régimen totalitario de Afganistán ha deshecho todos los avances conseguidos en lo que llevamos de siglo
Las mujeres de Afganistán habían comenzado una lenta recuperación de sus derechos desde el año 2002, cuando volvieron de nuevo a celebrar el 8 de Marzo bajo el amparo de Naciones Unidas, que de hecho puso un lema para aquel día que rezaba "realidad y oportunidades para la mujer afgana a partir de hoy". Las mujeres afganas fueron pioneras en la reivindicación de la igualdad, ya que hay registros de sus reivindicaciones ya desde principios del siglo XX. En los años 20 del pasado siglo, las niñas podían ir al colegio junto a los niños o se prohibieron los matrimonios forzados. Poco después lograron el derecho al voto, en 1964, y en los años setenta estaban presentes en el Parlamento y en los espacios públicos. Imágenes que ahora parecen una ensoñación ya que menos de un siglo después su situación es radicalmente contraria.
La ONU denuncia en este 8M que se han recortado las libertades de las mujeres, su derecho a la educación, su atención sanitaria física y mental y su libertad de movimiento. Recuerda que además del cierre de escuelas de secundaria, no pueden ir a un parque o a clubes deportivos, así como que están sometidas a un código estricto de vestimenta y que no pueden viajar sin permiso de un hombre. "Las mujeres son invisibles, están aisladas, ahogadas, viven en condiciones propias de una cárcel y no pueden responder a sus necesidades básicas", alerta Naciones Unidas.
Los talibán vetan el acceso a la universidad a las mujeres en Afganistán
Distintas organizaciones humanitarias como Amnistía Internacional vienen denunciando que los talibanes comenzaron a restringir los derechos de las mujeres desde su vuelta al poder en 2021 a pesar de su supuesto compromiso para que no fuera así. Una vez que las fuerzas internacionales se iban en un avión detrás de otro desde Kabul, el nuevo régimen volvió a implantar medidas para hacer desaparecer a la mujer de la vida pública del país. Según cálculos de UNICEF, más de un millón de niñas que deberían haber ido a la escuela secundaria han perdido la educación durante tres años, primero debido a la COVID-19 y después, desde septiembre de 2021, a la prohibición de asistir a la escuela secundaria. Y con datos de Amnistía, sólo en la primera mitad del año pasado fueron asesinadas 33 mujeres y desde agosto empezaron a cerrarse los refugios para mujeres y los mecanismos de apoyo jurídico con los que contaban.
A pesar de esta ola de represión, grupos de mujeres han salido a la calle este 8 de marzo en Kabul para reclamar sus derechos y libertades perdidas después de que el pasado lunes también se concentraran a las puertas de las universidades para exigir poder volver a sus aulas.
Antonio Martín
Redactor de la sección de Internacional. Se incorporó...