Alejandro Marías: "La música hay que disfrutarla, no intentar buscar nada más"

Madrid

Un encuentro en un AVE Madrid-Sevilla nos invita a conocer a Alejandro Marías. Toca el violonchelo y la viola da gamba; un instrumento peculiar, "un instrumento un poco raro, está entre un violonchelo y una guitarra. Decir esto es una barbaridad, pero así se entiende bien porque tiene 6 o 7 cuerdas, trastes porque puede hacer acordes pero se toca con un arco".

La viola da gamba desapareció a mediados del siglo XVIII, quedaron solo algunos ejemplares y a lo largo del siglo XX se ha ido recuperando. Se encontraron partituras, algunos ejemnplares que se habían conservado en museos y se comenzó a rescatar la viola da gamba.

Alejandro viaja en el tren con su viola porque es profesor en el Conservatorio Superior de Música de Sevilla, también es director artístico del conjunto barroco "La Spagna", miembro del cuarteto "Francisco de Goya" y colaborador de otras formaciones musicales como "Zarabanda".

Decidió dedicarse a la música a los 13 años, cuando notó resultados a su esfuerzo. Su entorno, su padre el músico Álvaro Macías, su abuelo el filósofo Julián Marías y sus tíos, entre ellos el escritor Javier Marías, le ayudaron a entender qué es tener vocación y hacer de ella su modo de vida.