La emoción de El Kanka al recordar a su padre en la SER: "Escucho esta canción y me pongo tontorrón"

«Piensas que estás solo. Pero igual que tú estás siempre aquí, pues vives en nuestro caminar. Estés donde estés, vamos a estar siempre muy cerca de ti». Cuenta El Kanka, que a él la pandemia de la COVID-19 se le quedó «chica» comparada con lo que tuvo que afrontar mientras el mundo parecía haberse parado. Juan Gómez, más conocido por su nombre artístico, El Kanka, asegura que en aquel 2020 estaba «viviendo una película», su película de éxito, a pesar de estar luchando con «los miedos cotidianos» de un virus que «parecía que iba a matar a cualquiera nada más salir a la calle». Poco sabía entonces el artista andaluz sobre el frenazo en seco que detendría esa película que estaba viviendo. Una simple llamada lo cambió todo. «De repente me llega la noticia de que mi padre está en el hospital, aunque no tiene nada que ver con la COVID», recuerda. Porque como cuenta el cantautor: «En España seguían pasando cosas un poquito menos mediáticas que la COVID». En una España confinada, con las carreteras cortadas para evitar la expansión del virus, el cantante sólo podía pensar en una cosa: despedirse de su padre. «Mi compañera María me llevó a Málaga, a la casa de mi hermana en una situación semi ilegal, no lo olvidaré nunca», cuenta. Ya en Málaga, El Kanka pudo sentir más cerca cómo su padre, que había sufrido un coma, se iba recuperando poco a poco pese a su edad. Y como músico que es, el Kanka afrontó los momentos más duros de la vida de su padre «dejándole una cancioncita». «Me llevé un micrófono de 200 pavos en la maleta por si había que hacer cosas desde casa de mi hermana», explica. Con ese micrófono, que cruzó media España con él de manera clandestina, el malagueño grabó «Zamba para mi padre». Un tema que habla de cómo sentir siempre cerca la ausencia de una persona que el propio artista sabía que no iba a volver a ver. El cantautor andaluz no puede evitar sonreír al contar cómo consiguió que su padre escuchara la canción desde el hospital en medio del confinamiento. «Se la ponía en la radio porque el muy cabrón no quería descargarse Spotify», narra. Aún así, Juan Gómez recuerda a su padre «como un tío moderno». El mismo «tío moderno» que a pesar de manejarse perfectamente con internet le obligó a mandar la «cancioncita» a las enfermeras en formato MP3. Su padre quería reproducirla tranquila y cómodamente en las radios del hospital. El Kanka se ríe al recordar que su padre ponía esa canción a las enfermeras, a los médicos y a todo el mundo que tuviera cerca mientras estaba ingresado. «Pero papá, que esta canción la vamos a publicar, no la hemos publicado todavía y no la puede escuchar todo el mundo», le decía El Kanka. «Te llevamos en el sueño, te hablan por telepatía. Cuando pase, ya veremos cómo reponemos todos esos días». Juan Gómez, saltó de Madrid a Málaga en una España confinada, consiguió componer «Zamba para mi padre» que amenizó los días de hospital de su padre para recordarle tantas veces como pudiera: «Estés donde estés, vamos a estar siempre muy cerca de ti». Pero el desenlace no fue el que habría deseado el cantante. «Mi padre finalmente empeoró y me despedí de él hace dos junios, con toda la pena de mi corazón», recuerda. Una pena que le vuelve de manera intermitente cada vez que escucha «Zamba para mi padre» porque confiesa: «Escucho esta canción y me pongo tontorrón». Esta es solo una de las muchas cosas que El Kanka ha contado hoy en los micrófonos de la SER para Hora 25. Si quieres saber más puedes escuchar la entrevista completa en el podcast del Hora 25.

La emoción de El Kanka al recordar a su padre en la SER: "Escucho esta canción y me pongo tontorrón"

El cantante malagueño ha contado a Aimar Bretos en Hora 25 cómo vivió los momentos más duros de quién le vio nacer

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