Sánchez buscará en China "una paz duradera en Ucrania"

Madrid

El motivo oficial del viaje de Pedro Sánchez a China, el próximo jueves, es que se cumplen 50 años del establecimiento de relaciones diplomáticas entre España y el país asiático pero lo cierto es que la reunión llega en un momento en el que el China ha cogido protagonismo en las negociaciones de la guerra en Ucrania. La guerra, o más bien cómo terminar con ella, será el asunto central sobre la mesa. Es previsible que Pedro Sánchez le reclame a Xi Jinping, como ya hizo en el último encuentro entre ambos el pasado mes de noviembre, que use su influencia para convencer a Putin de que ponga fin a la invasión. La visita es, además, la primera de un líder europeo desde que Xi Jinping se reunión con el presidente ruso en Moscú.

"Creo que es una buena oportunidad para conocer de primera mano el documento sobre la paz que hace unas semanas publicó el Gobierno chino", ha asegurado Sánchez en República Dominicana, donde asiste a la Cumbre Iberoamericana. El documento del que habla el presidente español es un plan compuesto por doce propuestas que Pekín presentó en el primer aniversario de la guerra y en el que pide un cese al fuego de ambas partes y defiende la integridad territorial de todos los países. También incluye una petición a Occidente para que finalice sus sanciones a Rusia, o el establecimiento de conversaciones de paz. "Es importante conocer de primera mano cuáles son los significados que hay detrás de estos puntos por parte directamente del presidente Xi Jinping", ha indicado Sánchez, quien ha recordado que China es un actor global y que "evidentemente su voz debe ser escuchada para ver si entre todos podemos poner fin a la guerra".

Dada la importancia del viaje, el gobierno español ha informado tanto a Estados Unidos como a la Unión Europea. Sánchez ha dejado claro, en todo caso, que "cualquier solución debe contar lógicamente con el apoyo de Ucrania y respetar la Carta de Naciones Unidas".

Entre los elementos de negociación la economía tiene un peso muy importante. "La Unión Europa sigue siendo el primer mercado para las exportaciones chinas, así que Bruselas tiene una carta muy importante para advertir al país asiático de los problemas económicos que le puede acarrear un enfrentamiento con su principal mercado de exportación", asegura Alberto Lebrón, investigador del Instituto de Economía Política Internacional de la Universidad de Pekín.

Pedro Sánchez aprovechará, además, para participar en el Foro económico de Boao, algo así como el Davos asiático. El Gobierno quiere aumentar la presencia de empresas de nuestro país en China, que aún es muy débil. El presidente también trasladará a Pekín la necesidad de mayores compromisos en materia de cambio climático.