El donante de esperma con 550 hijos denunciado en Países Bajos también donó en España

La fundación Donorkind, que defiende los derechos de las personas nacidas como fruto de una donación de semen, y una de las madres inseminadas han demandado a un donante de esperma de los Países Bajos a quien se le atribuye la paternidad de al menos 550 niños engendrados en 13 clínicas de ese país y también en en el extranjero. Según la legislación neerlandesa, un hombre puede ser donante para un máximo de 25 niños entre otras cosas para evitar posibles problemas derivados de la consanguinidad o posibles casos de incestos. Sin embargo, en este caso se ha superado ampliamente ese máximo legal y según la fundación el hombre ha mentido sobre el número de hijos que ha tenido aunque según explica él mismo se había comprometido a no saltarse la ley.

La asociación de ginecólogos de los Países Bajos ya había advertido sobre las prácticas de este hombre al detectar ya en 2017 que había participado en más de un centenar de donaciones. Se le incluyó entonces en una lista negra en las clínicas neerlandesas, pero siguió donando en otros países. Los demandantes relatan cómo el denunciado sigue utilizando las redes sociales para ofrecerse sin decir la verdad sobre los hijos que ya ha engendrado. Desde la fundación admiten a la SER que tienen testimonios de "mujeres que aseguran que ha donado también en España y que en ocasiones ha obtenido ayuda de una mujer española para donar en ese país". Nos explican que seguir el rastro desde los Países Bajos es especialmente complicado porque los donantes podían usar un alias hasta hace poco tiempo y, de hecho, en la actualidad hay un proyecto de ley en el parlamento neerlandés para, entre otras cosas, mejorar la identificación y evitar escándalos como este.

La ley evitaría un caso como el de Países Bajos en España

Rocío Núñez Calonge asegura en Hora 14 que es "prácticamente imposible que algo así pase en España" porque "la ley solo permite seis embarazos por donante" y que no pueda hacerlo "en varios sitios a la vez". Esta especialista, doctora en biología y experta en reproducción asistida y bioética alerta de que es excesivo que "en un país tan pequeño como los Países Bajos se permitan hasta 25 embarazos por donante, ya que como Holanda es "factible" que dos hermanos de padre puedan acabar conociéndose.

Si hubiera sabido que ya había engendrado más de cien hijos, nunca hubiera elegido a este donante. Cuando pienso en las consecuencias que esto podría tener para mi hijo me da un mal presentimiento y me entra la incertidumbre sobre su futuro

—  Eva, madre inseminada y denunciante

Los denunciantes exigen que se le prohíba que siga donando en cualquier país bajo pena de sanción, que no contacte con otros futuros padres y que el esperma suyo que esté almacenado aún en clínicas sea destruido de inmediato. Sólo se le permitiría según la demanda seguir donando para las madres que tienen al menos un hijo o hija de él para que esos hermanos estén tan genéticamente relacionados como sea posible.

Otros casos en los Países Bajos

La misma fundación denunciante localizó en los últimos años a una decena de médicos especialistas en tratamientos de fertilidad que usaron su esperma sin el consentimiento ni permiso de los padres. En este caso cobró protagonismo el nombre de Jan Karbaat, un doctor del que se confirmaron al menos 91 hijos por las pruebas de ADN, aunque la propia fundación reconoció que podría haber engendrado más. Varias madres se dieron cuenta del parecido de sus hijos y denunciaron sus sospechas en una carta al Ministerio de Sanidad neerlandés.

Karbaat murió en 2017 justo en la misma semana en que tenía una citación judicial para dar explicaciones por presunto abuso sexual y por su trabajo como especialista en fertilidad. Otros especialistas y ginecólogos fueron descubiertos cometiendo las mismas prácticas ilegales, como Jan Wildschut, que fue el padre sin consentimiento de al menos 47 personas nacidas entre 1980 y 1994.