Sánchez celebra que la reforma de las pensiones se apruebe con paz social a pesar de las críticas "lamentables" de Feijóo

Omán

A unas horas de que el Congreso de los Diputados convalide el decreto sobre el sistema de pensiones, Pedro Sánchez ha insistido en la importancia política y social de esa reforma frente a las críticas y el rechazo del Partido Popular, que votará en contra. El presidente del Gobierno considera que su aprobación es uno de los grandes hitos de la Legislatura, equiparable, ha dicho, a la reforma laboral. “Un matchball” — o punto de partido en el argot tenístico— que es el que ha usado durante la conversación. Para el líder del PSOE la reforma de las pensiones, como la laboral, son dos de las medidas por las que merece la pena todo su mandato.

Una relevancia que el jefe del Ejecutivo ha justificado tanto por fondo de los cambios; cree que servirán para solucionar el problema de la sostenibilidad y para llenar la hucha de las pensiones de cara a la jubilación de los ‘baby boommers’, como por la forma; cuentan con el aval de la Comisión Europea, el apoyo de una mayoría amplia del Congreso de los Diputados —votarán a favor además de los partidos de la coalición, los socios parlamentarios— y se han hecho, ha destacado, garantizando “la paz social”.

Para Pedro Sánchez, el “logro” del Gobierno va a dejar “en evidencia” al PP por voto en contra y criticar desde las instituciones europeas un decreto que tiene el visto bueno y ha sido trabajado con las propias autoridades europeas. La semana pasada, Núñez Feijóo, viajó a Bruselas para participar en una reunión del PPE y desde allí cargó contra la reforma de las pensiones. Algo que el presidente del Gobierno asegura que no entienden ni sus propios compañeros de partido en Europa. Asegura Sánchez que hay líderes de otros países pero de esa misma familia política que critican en privado la actitud del líder de la oposición. “Ha dado una imagen muy lamentable”, ha zanjado Sánchez sobre Núñez Feijóo.

“La importancia de la paz social”

En un momento en el que la reforma de las pensiones de Macron ha derivado en una oleada de protestas en las calles de Francia, Sánchez ha querido resaltar también que en España la propuesta de su Gobierno no ha provocado esa reacción ciudadana y tiene el visto bueno de los sindicatos. El presidente ha recordado que, sin embargo, en 2013 los cambios introducidos por el ejecutivo de Mariano Rajoy, que tenía mayoría en la cámara, se hicieron sin diálogo social y provocando manifestaciones por el recorte del gasto y la subida de apenas un 0,25%.

El presidente ha asegurado que mientras su gabinete “va cerrando conflictos”, en comunidades como Andalucía o Madrid los gobiernos autonómicos del PP son incapaces de solucionar, por ejemplo, los problemas en la gestión de la sanidad pública que además han provocado manifestaciones de miles de personas contra el presidente Moreno Bonilla el pasado fin de semana, o contra Isabel Díaz Ayuso en el mes de Febrero.

Sánchez cree que esa estabilidad será premiada en las urnas. “Estas semanas estamos trasladando la imagen de un Gobierno que avanza y hay un tema importante que cualitativamente la ciudadanía reconoce que es la paz social. En un contexto de tanta incertidumbre a causa de la Guerra, de su efecto en las economías, la paz social es un activo de mucho peso que se valora dentro y fuera de nuestro país”, ha dicho el presidente en esta conversación informal con periodistas en el vuelo a China.

La gestión como baza electoral

Pedro Sánchez, que inicia este jueves una visita oficial para reunirse con el presidente Xi Jinping y que la semana que viene viajará a Chipre, Malta e Italia para seguir con las reuniones preparatorias de la presidencia española del Consejo Europeo, asume que tras la Semana Santa su agenda estará centrada en la campaña para las elecciones del 28 de mayo. Una contienda en la que el líder del PSOE cree que hay que reivindicar la gestión del gobierno. Ese será uno de los principales reclamos también de cara a las generales de diciembre a las que espera llegar con la coalición unida a pesar de las tensiones que está generando en Unidas Podemos la conformación del proyecto político de Yolanda Díaz.

El presidente del Gobierno ha evitado entrar a valorar cuestiones internas de otros partidos. Se ha limitado a constatar que la Vicepresidenta segunda, que el domingo anunciará formalmente su candidatura en un acto en Madrid, va a estar arropada por prácticamente todos los actores políticos que se sitúan a la izquierda del PSOE. Solo Podemos se resiste a acudir. En cualquier caso, Sánchez ha dejado claro una vez más que quiere llegar a los comicios con Unidas Podemos dentro del ejecutivo. Cree Sánchez que, en conjunto, la izquierda tiene una “candidatura más competitiva” que la que conforman la derecha tradicional y la derecha radical.