"Le puede ocurrir lo mismo que a Al Capone": un experto en Norteamérica analiza la delicada situación de Trump

Madrid

Donald Trump ha sido imputado por comprar con el dinero recaudado de la campaña para las presidenciales el silencio de la actriz porno Stormy Daniels y se ha convertido así en el primer expresidente de Estados Unidos que se va a sentar en el banquillo. Al mismo tiempo, también está siendo investigado por otras causas como el asalto al Capitolio o los papeles confidenciales que escondía en su casa de Florida pero ha sido imputado por el caso en principio menos grave porque es el que lleva más tiempo arrastrando: "Esta causa, que parecía la menos importante o de menos trasfondo democrático, es la que de momento le va a llevar a este proceso judicial. Este paso es muy importante porque por primera vez se va a enjuiciar a un expresidente de EEUU y será un elemento a considerar por otros jueces en asuntos de mucha más enjundia", señala José Antonio Gurpegui, catedrático de Estudios Norteamericanos de la Universidad de Alcalá, que no duda en establecer un paralelismo con Al Capone, "que a final fue juzgado por un tema de evasión de impuestos cuando tenía delitos muchísimo mayores".

Gurpegui también destaca que este hecho "demuestra la fortaleza de las instituciones y de la democracia norteamericana, que Trump no ha podido cargarse". Este experto cree que ahora se abren dos escenarios para el expresidente: "En el partido republicano, le va a venir bien a corto plazo. Sus fieles seguidores tienen otro motivo para adherirse a sus postulados y han salido en masa a defenderle cuando está siendo muy cuestionado en el partido, ya que su fortaleza estaba en entredicho después de los pésimos resultados de mitad de legislatura. Hay quien le da por muerto en las primarias pero para mí sigue siendo a día de hoy el candidato republicano, así que dentro de este escenario del republicanismo le viene bien, pero ya no le viene tan bien dentro de la sociedad norteamericana. Yo creo que los norteamericanos tienen que recuperar la cordura".

Hace unos días, cuando Trump se empezaba a encontrar cercado, el expresidente amenazaba con terribles consecuencias si le acusaban formalmente: "Habrá muerte y destrucción", dijo. De momento, Gurpegui descarta que vaya a haber movilizaciones masivas para apoyarle y, desde luego, nada parecido a los disturbios del asalto al Capitolio. "Yo imagino que se estará planteando qué imagen va a querer dar", si colabora con las justicia o no. En sus primeras declaraciones tras su imputación, Trump ha hablado una vez más de "persecución política".