¿Viajas en coche? Todo lo que debes revisar en tu vehículo antes de tu vuelta de las vacaciones de Semana Santa

Después de una semana (o más en algunos casos) disfrutando de las deseadas vacaciones de Semana Santa, la DGT se prepara para la Operación retorno. Aunque los más previsores ya estarán en casa a estas horas, lo cierto es que la mayor parte de desplazamientos ocurrirán a lo largo de este domingo. Puesto que muchos de esos trayectos de vuelta tendrán como destino final las grandes ciudades, se esperan aglomeraciones y tramos de tráfico lento a la entrada de las mismas.

Con una previsión de hasta 16 millones de movimientos en España hasta el próximo lunes 10 de abril, la DGT compartió al inicio de esta Semana Santa una serie de recomendaciones para poder disfrutar de las vacaciones sin incidentes. Además de planificar el trayecto con antelación y elegir, en la medida de lo posible, las horas y días de menor tráfico, desde el organismo hacen hincapié en la importancia de poner a punto nuestro vehículo antes de coger la carretera y poner rumbo a nuestro destino vacacional.

Qué revisar en tu coche antes de viajar en Semana Santa

Es preferible prevenir que currar. Y por ese motivo, antes de iniciarnos en un viaje de cientos de kilómetros, es importante que todos los elementos de nuestro vehículo estén en orden para evitar encontrarnos con cualquier imprevisto, especialmente en zonas más remotas donde sea más complicado solucionar nuestro problema.

• Dirección. Al mover el volante podemos asegurarnos de que no se produzcan holguras, ruidos, dureza anormal al girar o desgate irregular de los neumáticos.
• Frenos. Tener los frenos a punto nos puede salvar de un buen susto. Para ello, habría que revisar las pastillas o zapatas, los discos y los niveles del líquido de frenos. Junto a esto, se puede asegurar el buen funcionamiento comprobando que el freno no realiza ruidos anómalos, que no está flojo o que no ha incrementado la distancia de frenado.
• Neumáticos. Son uno de los elementos más importantes. Por un lado, es necesario comprobar el nivel de desgaste de la rueda, asegurándonos de que la profundidad no es menor a 1,6 milímetros. Por otro, hay que confirmar que los neumáticos se encuentran en las presiones adecuadas y, en caso contrario, rellenarlos con aire para cumplir con los valores indicados por el fabricante (generalmente se encuentran indicados en el umbral de la puerta del conductor o la tapa del depósito). Además de por motivos de seguridad, circular con neumáticos desgastados puede suponer una multa de 200 euros.
• Luces. En este sentido hay que revisar que las luces funcionen y, asimismo, se encuentren en la dirección adecuada. De hecho, circular con una luz fundida puede suponer una sanción de hasta 200 euros. Es importante comprobar la altura de los faros delanteros ya que nos permiten ver con mayor facilidad y además, podrían cegar al resto de conductores o peatones. Estas se pueden regular con la ruleta de las luces. Los intermitentes también han de comprobarse.
• Batería. Para evitar quedarnos tirados en mitad en nuestro trayecto, es importante comprobar el estado de la batería. Para ello, hay que prestar atención a su desgaste, fijándonos si el vehículo sufre al arrancar, suena un chasquido al dar el contacto o se aprecia menos intensidad en las luces de cortesía.
• Niveles de los líquidos. Líquido limpiaparabrisas, aceite, el refrigerante, el líquido de frenos y el líquido de la dirección asistida.

También es recomendable pararse a comprobar que los elementos del interior de nuestro vehículo funcionan con normalidad. Entre ellos, es necesario asegurarse de los cinturones y los airbags están en perfecto estado para evitar sustos en caso de accidente, revisar el freno de mano, la palanca de cambio de marcha, las ventanas, el maletero, los tiradores y los botones.