Juicio a un osteópata de Barcelona por abusar sexualmente de 23 pacientes
La fiscalía pide más de 100 años de cárcel para el acusado
Barcelona
La Audiencia de Barcelona juzga a partir de este martes a un osteópata acusado de abusar sexualmente de al menos 23 pacientes, todas ellas mujeres. La fiscalía pide para el acusado 111 años de cárcel por aprovecharse de las víctimas y abusar de ellas, en algunos casos, con penetración. Tras pasar medio año en prisión preventiva, en 2017 quedó en libertad a la espera de juicio.
El acusado, Sergi M.P., es un fisioterapeuta titulado por la Universidad de Barcelona, que se había especializado en osteopatía preparto y postparto. Según la acusación, entre 2013 y 2016, se aprovechó de “su superioridad” en la consulta para hacer masajes y tocamientos a las víctimas, “con ánimo de satisfacer sus instintos libidinosos” y “basándose en el principio de confianza que las pacientes tenían con él”.
Las pacientes visitaban su consulta en Sant Cugat del Vallès, en la provincia de Barcelona, por dolores estomacales, problemas de espalda, de ciática, artritis o patologías de suelo pélvico. Según la fiscalía, el acusado aprovechaba la situación para hacer masajes en el culo a las víctimas, tocarles los pechos, la vagina o el ano. Se le acusa de 23 delitos abuso sexual y abuso sexual con penetración.
En el caso de una de las víctimas, “sin su consentimiento”, le introdujo “un dedo dentro de la vagina, y un dedo dentro del ano”, en mitad de la sesión. “Acciones que ninguna de ellas tenía relación con el tratamiento solicitado por la víctima”, asegura la fiscalía. A otra de las víctimas, le metió “la mano por debajo de las bragas” y le hizo friegas en la zona del pubis, “que le dejó en estado de shock”.
A otra de las 23 víctimas, “le desabrochó el sujetador y le tocó los pechos de manera sensual. Posteriormente la tumbó en la camilla, y le introdujo la mano por debajo de las bragas tocándole el clítoris de manera circular”, ante lo cual, la víctima, “muy incómoda por lo que le pidió que parase”.
La fiscalía pide además para Sergi M, más de 250.000 euros de indemnización para las víctimas. Para proteger la intimidad de las mujeres, tanto fiscalía como la abogada de algunas de las mujeres, han pedido que el juicio se celebre a puerta cerrada. La defensa del acusado ha solicitado, por su parte, que el osteópata sea el último en declarar en un juicio que previsiblemente durará 10 días.