Descubierta la mentira que conmocionó a todo Italia durante veinte años

Hace más de 20 años, a finales de la década de los 90, el nombre de Davide conmocionó a todo Italia. En ese entonces, un niño de 7 años, Davide, fue separado de su familia tras dos desahucios. La situación de pobreza severa había marcado la vida del menor.

Ellos personifican uno de los casos más infames de supuesta pedofilia

Tras la separación, el menor se fue a vivir con una familia de acogida. Y los relatos de Davide escandalizaron a su madre adoptiva. Davide hablaba de abusos sexuales, de rituales satánicos, de ceremonias en los cementerios y sacrificios de animales… En poco tiempo los nombres empezaron a aparecer en sus historias. Y no sólo los de los adultos supuestamente implicados, sino también los de otros niños que habían sido abusados. A día de hoy, a estos niños se les reconoce por ser los niños perdidos de Módena. Ellos personifican uno de los casos más infames de supuesta pedofilia.

Después de las primeras confesiones de Davide se produjeron las primeras detenciones. Primero la de sus padres y su hermano mayor, y después la de otra madre a cuya hija Davide nombró como víctima. Esta madre, desesperada por la situación, no concebía la vida sin su hija, no pudo aguantarlo y se suicidó. Es la primera víctima mortal de esta historia que se fue complicando con los años y llegó hasta los tribunales.

Los psicólogos y asistentes sociales de varios pueblos de Módena y Bolonia llegaron a separar a 16 niños de sus padres. Algunos iban a casas de acogida, otros a vivir en instituciones religiosas…Y desde que los separaban empezaban los interrogatorios para que les contaran los supuestos abusos. A medida que los niños empezaban a hablar, los carabinieri seguían deteniendo. Algunos de los arrestados ya habían tenido problemas con la justicia, pero otros resultaron una gran sorpresa.

Son muchas las cosas que impactan de este caso. Pero lo más asombroso de esta historia es el relato de Davide, ya que fue su testimonio el que destapó todo. Él colocó al frente de toda esta supuesta organización criminal a un párroco de la zona, muy querido y respetado que también acabó muriendo superado por la situación, en su caso de un infarto fulminante. Durante toda la década de los 2000 hubo hasta cuatro juicios en los que se condenó a decenas de supuestos implicados. Muchos de ellos acabaron en prisión e incluso las víctimas mortales siguieron aumentando porque alguno se suicidó en la cárcel, otras madres optaron por irse de Italia… Pero proceso tras proceso iban aumentando las dudas y muchos de los detenidos fueron absueltos. No había pruebas, todos los testimonios eran de menores… Había muchos clavos sueltos en esta historia. Por lo que se decidió volver a abrir el caso.

"Esta es una historia que no tiene lógica"

A la revisión realizada sobre el caso contribuyó una investigación periodística de un reportero que se zambulló en la historia muchos años después. "Esta es una historia que no tiene lógica. Todas las historias de crímenes tienen una lógica", ha explicado. Su nombre es Pablo Trincia, autor de 'Veneno. También los niños saben mentir. Y una mentira suya puede desencadenar el infierno'. "Nosotros no conocemos el fenómeno de los falsos recuerdos", ha explicado el periodista.

Gracias al trabajo de Trincia, el caso dio un tremendo giro y acabó como había comenzado, con una confesión de Davide, que decidió volver a hablar hace dos años. Tras más de dos décadas, Davide confesó que todo lo que había contado era mentira. Sin embargo, tal y como ha relatado Trincia, "judicialmente no se ha reconocido que es un error", ha sentenciado.