En Tol Sarmiento o Enfermedad de Transmisión Sexual: así es ETS, el grupo más escuchado en euskera

"Son muy majos y os van a encantar", nos dijeron nuestros compañeros de Radio Bilbao cuando les preguntamos por E.T.S. Íñigo Etxezarreta es uno de los fundadores de En Tol Sarmiento, el nombre de este grupo que "parece un poco fuerte, un poco de pueblo". De ahí que cogieran las siglas E.T.S., "a pesar de que todo el mundo sabe que tienen otro significado, enfermedad de transmisión sexual, pero así se acuerdan de nosotros", dice riendo el cantante y compositor. En Tol Sarmiento o ETS surgió en 2005 en Álava. Empezaron siendo tres amigos de Rioja Alavesa, él es de Gasteiz, Vitoria; otro es extremeño y el tercero de Logroño. Hoy son seis, los otros tres vienen de Gasteiz, Nájera y Bilbao. Influenciados por grupos como La Polla Records, Kortatu o Reincidentes, empezaron versionando canciones de punk-rock en español, antes de componer sus propios temas. "La lengua que más se escucha en nuestra tierra es el castellano, pero a medida que pasaban los años nos dimos cuenta de que podíamos ser unos referentes en nuestra tierra impulsando el euskera, a pesar de que no todos en el grupo lo hablan", nos cuenta.

Hoy cantan íntegramente en euskera y vaya si son referentes, en Euskadi arrasan, tanto en sus directos, agotando entradas, como en reproducciones: acumulan más de 78 millones entre Spotify y Youtube, son el grupo más escuchado en euskera. Del ska y el punk-rock en sus orígenes han virado hacia el pop. Guretzat es su último disco, el que contiene un abanico más amplio de estilos musicales, mezclan reaggue, ritmos latinos e incluso electrónica.

En una de sus canciones invitan a quitarnos prejuicios sobre el reguetón, por ejemplo, y es que desde cualquier género se puede reivindicar, según Etxezarreta. Ellos llevan haciéndolo desde sus comienzos, un grupo comprometido que ha tratado siempre de combatir injusticias y desigualdades. Han abordado temas como el derecho de autodeterminación, la violencia de género o el acoso escolar. "Los músicos tenemos no la obligación -dice- pero sí la oportunidad de dar voz a determinados temas de los que no se habla, sacar a la luz asuntos que cuesta expresar en público, incluso entre amigos o familiares". Uno de ellos, en Guretzat, es el del suicidio. Hace quince años Íñigo perdió a su hermano, nos confiesa, y le ha costado hablar de ello hasta ahora. "La música es una terapia para mí, como para muchos compositores y músicos, y es la intención de este disco. Hacer una sociedad mejor es demasiado utópico, pero sí sacar cosas que por educación nos cuesta".

Este Abuela Maitea, por ejemplo, es otro asunto del que se canta poco. Un precioso homenaje a nuestros abuelos y abuelas, a nuestros mayores que se ha convertido en todo un himno en Euskadi. El tema también surge de una experiencia personal, su abuela falleció el año pasado a los 98 años y esta canción se ha convertido en una de las más especiales de su vida. Su abuela le inspiró para componer Abuela Maitea. "Antes de fallecer la traduje al castellano para que la entendiera, se la canté personalmente y la escuchó, aplaudió, me dio las gracias y a los tres meses falleció". Etxezarreta estuvo grabando el último año con ella y de ahí que el videoclip haya tenido tanto éxito y hoy tantos se identifiquen con la canción, con su relación con sus abuelos y abuelas.

En la entrevista hemos repasado casi todas las canciones del álbum, un trabajo artístico, el disco físico, que también quieren valorar, aunque su música, está comprobado, está hecha para disfrutar, sobre todo, en vivo.