Zelenski le pide a Scholz más armas y firmeza para su entrada en la UE y la OTAN, tras la aprobación del mayor paquete de ayuda alemán

Madrid

Volodímir Zelenski aterrizó durante la mañana de este domingo en territorio alemán en la que es su primera visita oficial desde que comenzó la guerra a uno de sus principales aliados. En una primera parada, fue recibido en su residencia oficial por el jefe de Estado alemán, Frank-Walter Steinmeier.

Nada más llegar a Berlín procedente de Italia, el presidente de Ucrania dejó claro a través de Twitter los objetivos que trae bajo el brazo: conseguir más armas, una mejor defensa aérea, ayuda económica para la reconstrucción de las partes del país arrasadas por los combates, además de seguir dando pasos definitivos para la entrada del país del Este en la Unión Europea, en la OTAN, con garantías de seguridad de su territorio frente a Rusia.

La visita puede ser interpretada como una muestra de agradecimiento después de que Alemania anunciase que iba a entregar a Kiev el paquete de ayuda militar más importante hasta la fecha, valorado en más de 2.700 millones de euros, que incluye, entre tanto equipamiento, sistemas de defensa aérea, obuses con ruedas, artillería, munición de toda clase y hasta 30 tanques Leopard 1 y 20 Marder, además de más de un centenar de vehículos blindados de combate y de 200 drones de reconocimiento.

"En el momento más desafiante de la historia moderna de Ucrania, Alemania ha demostrado que es nuestro verdadero amigo y aliado de fiar, que está decididamente al lado del pueblo ucraniano en la lucha por defender la libertad y los valores democráticos", ha reconocido Zelenski en la mañana de este domingo.

Zelenski: "Cada medida de apoyo de Alemania, salva la vida de ucranianos"

Tras despedir al jefe de Estado alemán, Zelenski se ha dirigido a la Cancillería, donde ha sido recibido con honores militares, para mantener un encuentro con el canciller Olof Scholz. Para el canciller, que el presidente ucraniano esté en Alemania es una "fuerte señal" del compromiso inquebrantable que su país mantiene con la causa ucraniana. Señaló también su apoyo a una futura rendición de cuentas por parte de la cúpula del Kremlin en la que se juzguen "sus fechorías".

Desde el micrófono contiguo, Zelenski aseguró que cada nueva medida de apoyo de Alemania "ayuda a salvar la vida de ciudadanos ucranianos". "Siempre estaremos agradecidos", declaró. Sobre la guerra con Putin, dijo más concretamente, que este 2023 puede marcar la diferencia si el bloque de países occidentales socios de Ucrania y su propio país doblegan sus esfuerzos para "hacer inevitable la derrota de Rusia".

Respecto a la propuesta de paz sobre la que dialogó el sábado con el papa, defendió que su Gobierno está dispuesto a discutir una propuesta de paz con Moscú, siempre que respete todos los puntos del plan ucraniano para lograr el fin del conflicto bélico. Además, el mandatario ucraniano se mostró confiado en el éxito de una futura contraofensiva de sus fuerzas militares. "Estamos listos para el éxito", remarcó Zelenski.

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Zelenski recibe el premio Carlomagno

Después de reunirse con Sholz, Zelenski ha viajado hasta la ciudad de Aquisgrán, al oeste de Alemania, donde ha recibido el prestigioso Premio Carlomagno de Alemania (Karlspreis). Este premio está considerado como el más relevante de Europa Occidental y distingue a personas de todos los ámbitos que hayan realizado importantes servicios en pro de la humanidad, la paz mundial y la unidad europea.

En Aquisgrán, ha aprovechado para reunirse con la presidente de la Comisión, Ursula Von Der Leyen, que ha sido una de las oradoras durante la ceremonia del premio, en la que también ha intervenido el primer ministro polaco Mateusz Morawiecki, al que Zelenski ya visitó el pasado 5 de abril.

Visita a París

El presidente ucraniano ha viajado hasta París este domingo y ha sido recibido en el aeropuerto de Vélizy-Villacoublay por la primera ministra francesa, Elisabeth Borne, y la ministra francesa de Relaciones Exteriores, Catherine Colonna. Posteriormente, Zelenski ha cenado con el presidente francés, Emmanuel Macron.